El Ministerio de Medio Ambiente inició el pasado año trabajos de reforestación para recuperar la cubierta vegetal destruida por las llamas en el último gran incendio sufrido por los montes de San Gregorio hace dos años. Sin embargo, el efecto de estas actuaciones, que cuentan con un presupuesto de siete millones de euros, tardará en ser perceptible. Se calcula que deberán pasar 25 años para que las laderas y barrancos que ardieron en el verano del 2009 recobren el aspecto que tenían antes de producirse la catástrofe.