El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, defendió ayer el pacto que suscribieron el pasado 13 de septiembre los partidos de izquierdas con representación en el parlamento y que sirve, dijo, para recuperar los derechos y servicios perdidos con la gestión del PP-PAR y devolver el prestigio a la comunidad.

Lambán contestaba así, en la sesión de control al Gobierno en el pleno de las Cortes, a una pregunta formulada por el portavoz del PAR, Arturo Aliaga, sobre los beneficios «concretos» que obtendrán los aragoneses con este pacto que, a juicio del aragonesista, demuestra los «desencuentros» y «desconfianzas» existentes entre el PSOE y los grupos que apoyaron la investidura de Lambán.

Este, sin embargo, aseguró que el pacto tiene la voluntad de «revelar con franqueza» en qué consiste la estabilidad en estos tiempos y, sobre todo, seguir recuperando los derechos sociales y los servicios públicos que, a su juicio, «puso en peligro» la gestión del PP y el PAR en la pasada legislatura. Y para devolver a Aragón un prestigio que dejaron «absolutamente por los suelos».

TENSIONES

Aliaga precisó, por su parte, que el incumplimiento de los pactos que posibilitaron la investidura produce «tensiones» que afectan a la gobernabilidad y que se han querido «disimular» con el nuevo acuerdo de la izquierda. En él, relató, no hay compromisos ni fechas ni plazos, más allá del primer pacto, que no aparece en el texto, referido al relevo en la presidencia de las Cortes, que ostenta ahora Podemos y no el PSOE.

Lambán, a este respecto, le recordó a Aliaga que la actual presidenta, Violeta Barba, procede de un grupo de 14 diputados, pero la legislatura pasada el PAR, con siete diputados, tuvo no solo la presidencia, sino «casi el Gobierno de Aragón entero». Ahora, añadió, se negocia con luz y taquígrafos, de cara a la ciudadanía, cuando antes los acuerdos los firmaban la presidenta del PP, Luisa Fernanda Rudi, y el entonces del PAR, José Ángel Biel, en un despacho «a oscuras».

Aliaga, además, recordó a Lambán que en su discurso de investidura se comprometió a buscar en consenso en grandes asuntos no solo con los grupos que lo apoyaron, y estimó que el acuerdo del 13 de septiembre «parece que obvia que para construir un Aragón de futuro se necesita trabajar todos en la misma dirección».

El portavoz del PP, Roberto Bermúdez de Castro, preguntó a Lambán por las medidas que va a adoptar para dar «estricto cumplimiento» a la ley de presupuestos del 2016, en alusión a una serie de enmiendas aprobadas al texto durante su tramitación parlamentaria que no fueron incluidas en el estado de ingresos y gastos. Supone, dijo, que se ha estado ejecutando «hasta anteayer» un presupuesto que no ha sido aprobado por las Cortes, y lamentó que el Gobierno de Aragón no comunicara los errores detectados en el texto cuando tuvo conocimiento de ellos. De hecho, le recordó el informe elaborado por la dirección general de presupuestos el pasado 24 de julio al respecto, que llegó a la cámara dos meses después.

Lambán aseguró que su primer presupuesto será el de mayor grado de ejecución de ingresos y gastos de los últimos diez años, frente a los del Gobierno anterior, que han sido cuestionados, dijo, por la Cámara de Cuentas por consignar ingresos irreales para cuadrar los números.