Lejos queda o así lo quiere hacer ver el secretario general de los socialistas aragoneses, Javier Lambán, que su apuesta, en las primarias que el PSOE celebró en mayo, fue Susana Díaz y no Pedro Sánchez, que, al final, ganó la contienda. Ayer, Lambán anunció que se presenta a las primarias para la reelección como líder socialista y que su candidatura «está alineada» con Ferraz. Fue la respuesta que quiso dar a la exconcejala del Ayuntamiento de Zaragoza, Carmen Dueso, que había dicho el viernes que su candidatura está «avalada» por el aparato del partido de cara a «defender el proyecto» de Pedro Sánchez. Un aviso a navegantes.

Lambán eligió el Museo Pablo Serrano de Zaragoza como singular escenario para presentar su candidatura. Fue a visitar una exposición de Masats sobre la película Viridiana de Buñuel y allí dijo que sería candidato. Curiosamente solo estuvo arropado por Mayte Pérez, que aunque forma parte de los comités federal y regional del PSOE, ayer acompañó al presidente en su calidad de consejera de Cultura. Ningún otro cargo orgánico del partido.

CONTRIBUCIÓN / «Soy leal y voy a luchar al máximo para que Pedro Sánchez gobierne España», resaltó Lambán a los periodistas al tiempo que afirmaba que la «mejor contribución» para ello son las políticas de izquierda puestas en marcha por el Gobierno de Aragón. Y es que Lambán presentó su candidatura dejando claro que no solo es secretario general del PSOE aragonés, sino presidente del Ejecutivo autonómico y que «no cree en las bicefalias» porque «terminan en fracaso».

Lambán ligó su candidatura a las primarias a tres objetivos muy marcados. El primero «mantener la estabilidad de Aragón», a partir de políticas de izquierdas y seguir siendo atractivos al electorado que apostó por un gobierno contrario al anterior. De hecho, insistió en la necesidad de «caminar por la senda de la unidad y de la integración». «Hay que ser percibido como una organización unida, si no se está abocado al fracaso electoral», recalcó, mientras dibujó una dirección del partido «sin exclusiones» para «dar satisfacción a los 8.000 militantes socialistas aragoneses». También destacó que su candidatura contibuye a «la senda de la renovación impulsada en el 2015». «Acometí un cambio del 90%, por lo que tengo la legitimidad de seguir desarrollándola», remarcó.

Que su contrincante sea Dueso, presidenta de la Agrupación Norte de Zaragoza, una de las más fuertes del aparato socialista en la ciudad, no ha pasado desapercibido para Lambán, quien anunció la creación de una organización específica del PSOE de Zaragoza que, acualmente, está diluída en el órgano provincial «con intromisiones». «Hay que poner en marcha secretarías potentes», añadió.

PROBLEMAS / De hecho relacionó esta situación con «el problema que tiene el PSOE de que no gobierna en las grandes capitales españolas como Zaragoza, pero también Madrid, Barcelona, Valencia o Bilbao». «Es obvio que somos incapaces de conectar con los jóvenes o con las clases medias urbanas», lamentó.

Un planteamiento que hizo que los periodistas presentes en este acto, en el que Lambán quiso ligar su imagen de secretario general del PSOE a su trabajo como presidente, le preguntaran si es necesario cambiar el grupo municipal socialista en Zaragoza, a lo que contestó que eso se verá cuando se acerquen las elecciones. De hecho, también dejó en el aire qué pasaría si perdiera las primarias, ya que el escenario resultante podría conllevar que se adelantaran las elecciones. Sobre ello, advirtió que quiere un PSOE «fortalecido», «sin bicefalias» y que de ello hablaría el día 8 de octubre, que es cuando se celebra el proceso de votación. No obstante, quiso mostrar imagen de fortaleza afirmando con rotunidad: «No voy a perder».