El presidente de Aragón, Javier Lambán, cargó ayer contra la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) de mantener el horario de la asignatura de Religión en Primaria (90 minutos semanas en vez de 45 minutos) y dijo que «lo de la Religión y los jueces empieza a ser digno de un serial radiofónico, televisivo o de cualquier naturaleza», señaló Lambán. «Uno no entiende de entrada que los obispos recurrieran, porque en otras comunidades no lo han hecho», dijo.

Educación ya anunció que recurrirá las medidas cautelares estimadas y el presidente señaló que tampoco comprende que «el tribunal que nos dio la razón ahora nos la quite», dijo. Y es que una sentencia del mismo órgano judicial, el TSJA, reconocía hace solo 15 días la legalidad del currículo de Primaria del Departamento de Educación y que establecía un mínimo de 45 minutos semanales para esta materia.

«Acepté con satisfacción la decisión de julio, porque entendemos que se atiene estrictamente a la legislación vigente, ahora se aplican unas cautelares porque los obispos han recurrido», añadió Lambán en Huesca.

Así, se ha estimado la petición del Arzobispado de Zaragoza y de los obispados de Huesca, Teruel, Albarracín, Jaca, Barbastro-Monzón y Tarazona y se deja sin efecto la distribución horaria semanal de la asignatura de Religión de 45 minutos que establecía Educación para el próximo curso escolar en la comunidad.

Planificación / Por su parte, el grupo parlamentario de Podemos en las Cortes de Aragón tachó de «escandalosa» la decisión del TSJA de paralizar «su propia sentencia» sobre el horario de Religión. La formación morada lamentó el «giro judicial de 180 grados con el que el tribunal se niega a sí mismo» y advirtió de las consecuencias que va a tener para los centros educativos. «Acababan de planificar el currículo y el personal del nuevo curso conforme a la sentencia que establecía la impartición de 45 minutos a la semana», apuntaron.

Podemos recordó la sentencia de julio y señaló que era «clarísima» porque «avalaba la legalidad absoluta de una medida que ya se aplica en numerosas comunidades y era coherente con la jurisprudencia del Tribunal Supremo en la materia», explicaron.

El diputado Carlos Gamarra consideró que «es incomprensible que el mero anuncio por parte de las diócesis aragonesas de un futuro recurso ante otro tribunal haga que el TSJA paralice su propio veredicto», dijo.

«Se escapa de toda lógica que el pronunciamiento, que cinco jueces tardaron más de un año en estudiar, haya sido congelado en apenas unos días por otros magistrados», añadió Gamarra.

Podemos lamentó que cientos de centros y miles de familias «van a ver cómo, una vez más, e incluso con sentencia favorable, los jueces impiden la oportunidad de ampliar el horario de otras materias como Inglés, Música, Matemáticas o Lengua».