Quinientos invitados en el Salón de la Corona del Edificio Pignatelli; el Gobierno en pleno dispuesto a prometer el cargo y el hijo de Pilar Alegría que se asoma raudo al escenario para ver a su madre, nueva consejera de Innovación, Investigación y Universidad. Fue el único capaz de saltarse el protocolo, chupete incluido, antes de que el presidente, Javier Lambán, marcase la hoja de ruta a seguir para su equipo. En su discurso, breve y protocolario, situó "por encima de todo", en el centro de las políticas del nuevo Ejecutivo, a las personas.

Cumplidos los trámites, investiduras, tomas de posesión, publicaciones en boletines, nombramientos, llegó el momento de que el nuevo Ejecutivo empiece a funcionar. El primer Consejo de Gobierno se celebró ayer, aunque de carácter testimonial para analizar la situación del incendio de las Altas Cinco Villas. Antes, en el acto en el que los consejeros prometieron sus cargos, Lambán invitó a los suyos a "redoblar" esfuerzos para alcanzar los acuerdos necesarios para llevar adelante una legislatura en la que los pactos serán más necesarios que nunca.

CHUNTA

El primero es ya una realidad, el alcanzado con CHA, personificado en José Luis Soro, al que ayer el presidente agradeció su entrada en el Ejecutivo, por el compromiso que entraña. Asumió las discrepancias que existen entre el PSOE y Chunta, pero remarcó que son muchas más las afinidades. Entre ellas las líneas que subrayó para su equipo del que forma parte Soro como consejero de Vertebración Territorial, Movilidad y Vivienda.

El primer objetivo, Lambán ha insistido en esta idea en sus últimos discursos, es erradicar la pobreza, para que ninguna familia, dijo, "en poco tiempo" esté "asolada" por ese fenómeno "inaceptable desde el punto de vista ético". Los servicios públicos, su reconstrucción, es otra línea básica del Ejecutivo socialista. En el plano económico, el presidente tiene como reto dignificar una recuperación que ahora, dijo, es "injusta". Lamentó que el empleo que se esté creando sea precario y sobre todo mal pagado. De ahí que considerara fundamental para que produzca "justicia", y que se fortalezcan los derechos de los ciudadanos y constituyan un factor de prosperidad bien repartida y solidaria. Alcanzar estas metas significa por sí mismo haber logrado colocar a las personas en el centro de las políticas del Ejecutivo, verdadero mandato de Lambán a su equipo, que ayer ya ocupó sus respectivas consejerías.

BILATERALIDAD

Volvió a insistir en que Aragón debe implicarse activamente en la gobernanza de España, "con resolución y con audacia", porque será la mejor manera de defender los intereses de Aragón.

Amante de las citas, Lambán en este caso puso como ejemplo para su equipo a Frances Perkins, secretaria de Trabajo de Estados Unidos entre 1933 y 1945, dentro del gabinete del presidente Franklin Delano Roosevelt. Esta socióloga y política americana trabajó de forma activa por los derechos de los ciudadanos, aspiración que, subrayó, deben tener los nueve consejeros que conforman su Consejo de Gobierno. Más allá de los aciertos o errores de todos ellos, advirtió el presidente, estarán en sintonía con las prioridades de la sociedad aragonesa en este momento y habrán prestado una labor a la comunidad, que es para lo que han sido elegidos.