El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha comprometido el esfuerzo de su ejecutivo con Arento, cooperativa agroalimentaria de segundo grado, para que esta "no caiga", y así se demuestra con el aval de 14,4 millones que le ha concedido el Ejecutivo para sanear su situación.

Lambán, durante la visita a la Cooperativa de Magallón, ha destacado el "papel fundamental" que una cooperativa de segundo grado desempeña en una comunidad donde casi todas las organizaciones de este tipo son muy pequeñas.

Ha reconocido, en declaraciones a los medios, que Arento contaba con problemas, pero también ha dicho que el Gobierno de Aragón "ha entendido" que le tenía que ayudar para la supervivencia del propio sistema cooperativo agrario.

Los 14,4 millones, en este sentido, no son una subvención, sino un aval para contribuir a sanear la situación de una cooperativa que en enero aprobó una ampliación de capital de cuatro millones de euros para compensar los gastos financieros y dificultades de financiación en la época de crisis.

El presidente ha aprovechado para animar a las cooperativas que en este momento tengan "algún tipo de duda" acerca de seguir o no en Arento para que acudan a las ampliaciones de capital, "mas o menos ambiciosas", que se puedan plantear.

"Que sepan que tienen detrás de su esfuerzo al Gobierno de Aragón, que va a hacer lo posible para que Arento no caiga", ha concluido.

Ayer, el Consejo de Ministros autorizó al Gobierno aragonés la concesión del aval para que Arento pueda reestructurar su deuda financiera y asegurar su estabilidad.