El presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán, reconoció ayer que el tiempo que el presidente de las Cortes y alcalde de Barbastro, Antonio Cosculluela, está compatibilizando los dos cargos está siendo "excesivamente largo", aunque asumió que su intención final es "buscar una salida ordenada de la alcaldía" y que no se tiene que confundir con "la acumulación de retribuciones económicas o de poder".

El presidente reconoció que cuando se le ofreció al oscense la presidencia de las Cortes en el comienzo de la legislatura ya eran conscientes de que los dos cargos a la larga no podían ser compatibles y que en aquel momento Cosculluela ya pidió "un tiempo" para dejar la alcaldía de Barbastro. Lambán también confirmó en que la renuncia al cargo municipal se producirá al final del actual periodo de sesiones, en julio.

El presidente del Ejecutivo realizó esta valoración en un encuentro con militantes en el que también le preguntaron por otras cuestiones de actualidad, especialmente centradas en el encaje de Cataluña en España, después de que los barones socialista le indicaran a Pedro Sánchez que el pacto con los independentistas era una línea roja en sus negociaciones para formar gobierno. "El PSOE es el único partido que apuesta por una reforma federal de la Constitución", destacó. Con esta reforma espera que se pueda solucionar el encaje de Cataluña reconociendo sus "hechos diferenciales" siempre que no se rompa "el marcho de convivencia". Además, indicó que la mejora de la financiación autonómica también sería positiva para Aragón.

Sobre la política en la comunidad, afirmó sentirse cómodo en la coalición con CHA y consideró "importante" la aportación de IU. Con Podemos la situación es "más complicada" al considerar que "sobreactúa" a la hora de buscar diferencias, pero que hasta el momento su actuación como oposición es "responsable".

Precisamente Podemos también rindió ayer cuentas ante sus militantes en el Centro de Historias de Zaragoza después de haber ofrecido su voto a los presupuestos del PSOE