El cambio climático es uno de "los problemas más graves de nuestro tiempo", según el presidente del Ejecutivo aragonés, Javier Lambán. Por este motivo, se mostró convencido de que la solución real únicamente llegará "si se opera un cambio radical en la conciencia y la ética de la propia humanidad".

Lambán realizó estas reflexiones ayer durante el acto de clausura de la entrega de los Premios Medio Ambiente de Aragón que tuvo lugar en la Sala de la Corona del Pignatelli. El presidente coincidió con el papa Francisco tanto en la descripción del problema como en abordarlo como un asunto ético y no dudó en reclamar la implicación "de la sociedad civil". También asumió que hace falta un esfuerzo necesario para "imponer" otros comportamientos a las élites productoras de los mayores problemas ecológicos del planeta, argumentando que "la mutación ética les tardará en llegar".

En este sentido, defendió que en Aragón se intentarán atajar los efectos perniciosos de la emisión de gases con efecto invernadero y difusos a través del programa Agroclima. También se busca tratar que el 85 % del origen de la energía eléctrica sea limpia en el 2020 y apostar por la producción de renovables, sobre todo eólica, como foco de creación de riqueza y empleo de calidad o la apuesta por el hidrógeno.

Por su parte, el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, destacó que tanto las acciones individuales como las colectivas "son importantes a la hora de preservar el medio ambiente, y los proyectos de los premiados en esta edición responden claramente a esa expresión".

El trabajo de DKV Seguros, que cuenta con varias certificaciones ambientales; Iberfunghi Biotecnológica, por su actividad basada en el cultivo de setas a través de la recuperación de posos de café; la asociación para la Recuperación de Olivos Yermos de Oliete y la actividad académica de la escuela de Laspuña y el CEIP Cándido Domingo fueron los galardonados por el Gobierno aragonés.