El debate sobre el Impuesto sobre la Contaminación de las Aguas (ICA) está lejos de solucionarse. Tras la espantada de la Red de Agua Pública de Aragón (RAPA) de la mesa técnica en la que se trató de establecer una base para la reforma del tributo, el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, lamentó la situación generada y criticó que desde determinados ambientes se esté intentando alargar «el conflicto» para «obtener réditos políticos».

El responsable de la DGA defendió la labor desarrollada en la mesa técnica de la consejería de Desarrollo Rural y consideró que «organizaciones muy respetables» asistieron a ella «con responsabilidad» y que gracias a ello consiguieron alcanzar el acuerdo ahora denostado por una de las partes. Defendió especialmente el aporte de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias al considerarla «una de las organizaciones más importantes de representación de la sociedad aragonesa».

SIN ENTENDIMIENTO

Desde Podemos, una de las formaciones que defienden posturas similares a las de la RAPA, achacaron las diferencias en el proceso a la hora de consensuar un nuevo modelo para el ICA a la «incapacidad» de la DGA a la hora de negociar.

Podemos insistió en que se analice en profundidad las propuestas que tanto la RAPA como la Universidad de Zaragoza han puesto sobre la mesa «para incorporarlas al acuerdo firmado en la mesa técnica», un documento que el responsable del partido morado, Nacho Escartín, consideró «una patada hacia adelante inasumible» y «una hoja parroquial» por lo genérico de sus postulados. Además, Escartín insistió en que la comisión bilateral entre la DGA y el Ayuntamiento de Zaragoza que regula la ley de capitalidad también debería participar en el debate.

La DGA tiene que presentar en las próximas semanas un texto definitivo que sirva como base al debate parlamentario en el que debería acordarse una reforma del impuesto.

Los colectivos críticos tienen previsto iniciar una campaña informativa en su contra en todo Aragón para recordar el fracaso de los planes de depuración.