El conflicto por la reclamación de los bienes del monasterio de Villanueva de Sijena y el independentismo catalán volvieron a enredarse ayer en las declaraciones del presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán. El dirigente autonómico acusó a las actuales autoridades catalanas de haber consumado su «primer acto de rebeldía contra el estado de derecho» tras incumplir por segunda vez el ultimátum judicial que les obligaba a trasladar las obras que conforman el tesoro del cenobio retenidas en Lérida a su emplazamiento original el pasado 31 de julio.

En su primer acto tras la vuelta de vacaciones, el dirigente socialista desvinculó la actual polémica del conflicto patrimonial para centrarse en el proceso de recursos y autos en el juzgado. «El problema de los bienes depende únicamente de una resolución judicial que no acaba de llegar», alegó en alusión a las más de veinte ocasiones en las que la DGA ha solicitado la intervención policial para recuperar las obras.

Por el momento dejó claro que se ha dado por cerrada la vía del diálogo que hace más de un año ensayaron los consejeros Mayte Pérez (por Aragón) y Santi Vila (por Cataluña). «No se puede estar en misa y repicando», expresó, al constatar que por culpa de la furibunda reacción de parte de los socios del PDECat se truncó una propuesta que convencía a ambas partes. «Se puso de manifiesto que en este momento con la Generalitat no se puede dialogar sobre esto ni sobre ninguna otra cuestión», zanjó.

Lambán rechazó también algunas de las acusaciones internas que han recibido en los últimos meses, especialmente las formuladas por la portavoz de Podemos, Maru Díaz, que denunció «el teatrillo» montado alrededor de un conflicto todavía en fase de apelaciones. «Deberían ser más justos en el reparto de culpas y de responsabilidades y dirigir su artillería mediática hacia los verdaderos responsables de la situación», afirmó el dirigente.

A LA ESPERA

Lambán reclamó para los próximos meses un mayor consenso a la hora de articular una estrategia. «Nadie en Aragón debiera estar en una posición diferente a la de defender ley del Estado de derecho y la democracia», expuso.

La DGA es consciente de que el próximo mes muy difícilmente se producirán avances en el litigio, pues tanto la magistrada responsable del Juzgado de Instrucción número 1 de Huesca que ha iniciado el procedimiento como el letrado del Ayuntamiento de Villanueva de Sijena están de vacaciones.

Por otro lado, en los meses de septiembre y octubre coincidirán algunos de los actos más destacados de la agenda independentista catalana, como la celebración de la Diada o del referéndum de autodeterminación. Según fuentes consultadas por este diario, es poco probable que en ese contexto la judicatura decida favorecer la imagen de las fuerzas de seguridad entrando en un museo, así que se impone la paciencia para resolver el litigio.