Las ayudas de urgencia a las familias de la ciudad de Zaragoza más afectadas por la actual crisis económica y cuya situación se encuentra en los umbrales de la pobreza se demoran una media de casi tres meses, aunque en algunos casos el retraso puede llegar a superar los cuatro meses.

Así lo explicó ayer en el secretario general de Cáritas en Zaragoza, Francisco Yagüe, quien advirtió de los graves efectos que ha causado a estas familias la prolongación en el tiempo de la crisis, con un aumento de los conflictos familiares y un mayor número de casos de violencia a menores, informa Efe.

Yagüe, quien comapreció junto al director de la organización en Zaragoza, Carlos Sauras, para informar de la campaña de sensibilización de la Navidad, ha destacado que el retraso en las ayudas urgentes es mayor en la capital que en el resto de la provincia, donde la espera es de dos meses.

Este retraso afecta también al Ingreso Aragonés de Inserción, ayuda dirigida a garantizar los recursos mínimos de subsistencia de las familias cuya percepción hasta el pasado mes de octubre se demoraba entre siete y diez meses.

Según el responsable de Cáritas en Zaragoza, estos retrasos acrecentan la situación de empobrecimiento de las familias y un debilitamiento generalizado de sus condiciones de vida que se trasluce en una alimentación deficiente, aumento del endeudamiento y pérdida de vivienda.

Ha añadido que el largo periodo de crisis, que comenzó a afectar a algunas familias en 2008, genera en sus miembros sentimientos de angustia, desasosiego, rabia, indefensión, desmotivación e incertidumbre, llegándose a detectar en algunos casos un aumento de personas en atención psiquiátrica.

A pesar de la gravedad de la situación que atraviesan algunas de las familias atendidas por Cáritas, los datos aportados revelan que en la capital aragonesa la media de tiempo desde que los afectados recurren al servicio social hasta que se concede la primera cita es de un mes.

Los centros municipales de servicios sociales de Zaragoza capital son los que más retraso acumulan, algunos con demoras que superan las de 2010 como los de Universidad, Centro Actur y San José.

Yagüe explicó que los últimos datos sobre la evolución de las condiciones de vida, de 2010, revelan que un 13,6% de la población aragonesa se encuentra en situación de pobreza.

La pobreza en Aragón incide más entre los mayores de 65 años (25,32%) y los menores de 25 (20,12%), y afecta más a las mujeres (20,11%) que a los hombres.

En cuanto a la labor desarrollada por Cáritas este año en Zaragoza, el secretario general de la organización ha destacado que el número de ayudas se ha incrementado en un 11% respecto al año anterior y en un 14% el importe de las mismas.

Por su parte, Sauras ha advertido que el progresivo incremento de familias afectadas por una situación de empobrecimiento se ha agravado a causa de la "poca agilidad" de las administraciones públicas a la hora de atender a estas personas. Sauras explicó que 2009 fue el año "más duro" pero en 2011 ha aumentado.