Una de las medidas de ajuste más destacadas que tomará a corto plazo el área municipal de Deportes afectará a las 23 piscinas municipales que en la próxima temporada de verano abrirán sus puertas una semana más tarde de lo previsto y verán reducido su horario en 30 minutos para aminorar gastos. Todo por ahorrar "unos 400.000 euros" en la próxima campaña y así ayudar a reducir el déficit que sule acumular año tras año este servicio público. Este ha rondado los 9,5 millones en los últimos ejercicios y se va a tratar de atajar.

Así lo aseguraron a este diario fuentes oficiales del consistorio, quienes también admitieron que esta temporada será la más corta de los últimos años, ya que solo durará "86 días". En las últimas tres campañas se prolongó durante 93, 96 y 100 días, respectivamente, pero esta vez será como mínimo una semana menos que la cifra más baja. Y es que la apertura de las piscinas está prevista para el próximo 9 de junio. Aunque el responsable del área, Roberto Fernández, reconoció que también se ha estado sopesando la opción del día 14, pero esta parece poco probable.

ESCASA AFLUENCIA "Se ha detectado que esa primera semana es de muy escasa afluencia, apenas del 10% del total del primer mes, nada que ver con julio, agosto y septiembre", explicaron.

La otra decisión importante afectará al horario de apertura de los centros, que hasta ahora estaban abiertos de 10.30 a 21.00 horas y este año no se podrá acceder a ellos hasta las 11.00 horas. Los responsables municipales afirmaron que esta medida genera "importantes ahorros" cuando la presencia de usuarios es "escasa" en esos primeros minutos. Se calcula que serán unos 250.000 euros los que suponen esos 30 minutos menos, entre un menor consumo energético, de compra de productos químicos para el tratamiento de aguas o para la limpieza, o una reducción de la jornada laboral de los empleados contratados para la explotación y el mantenimiento. Pasarán a ser de siete a seis horas, o de seis a cinco, según el puesto de trabajo. Además, hay que añadir que este año abren todas las piscinas y no hacen falta mejoras como otros años.

Aún así, ambas medidas tienen un objetivo: el mantenimiento del empleo. Y no tanto de los funcionarios como del personal que cada año se contrata a través de empresas a las que se les ha externalizado determinados servicios. Serán "138 puestos de trabajo los que se garantizan", informaron las fuentes consultadas.

Estos empleos corresponden a los tres trabajadores de contratas externas por turno (hay dos turnos) en cada una de las 23 piscinas municipales (contando la del Príncipe Felipe). Estos empleados "tendrán garantizado su puesto de trabajo esta temporada, algo que podría no ocurrir en caso de no adoptar medidas".