El lobo solitario de los Monegros acaba de volver a entrar, presuntamente, en acción tras llevar meses desaparecido. Así se demostró ayer en el centro de Recuperación de Fauna Silvestre de La Alfranca tras realizar la necropsia a los dos ejemplares muertos en una explotación ganadera de la localidad zaragozana de Leciñena, a tan solo 300 metros del núcleo urbano. Los cadáveres «muestran evidencias de que el ataque podría ser compatible con el lobo», confirmaron fuentes del Gobierno de Aragón.
En un primer momento, la DGA negó que se tratara de otro ataque similar a los que se produjeron el pasado verano, a pesar de que los ganaderos de la zona estuvieran convencidos de ello.
El ganadero Jaime Seral denunció que el animal saltó la valla de un campo que solo dista 300 metros del pueblo de Leciñena y degolló dos borregos. La forma en que murieron los machos, con el cuello desgarrado, muestra que se trata del cánido que deambula por la comarca monegrina desde finales de la pasada primavera.
Desde que se tuvo constancia de la presencia de un lobo en la comarca de Los Monegros, el Gobierno de Aragón ha estado trabajando en una orden que pudiera compensar a los ganaderos y asumir el riesgo que para ellos supone convivir con una especie protegida, informaron las mismas fuentes del Gobierno autonómico.
«Nunca se había acercado tanto al pueblo», señaló ayer Seral, que indicó que ese último episodio tuvo lugar durante la noche del pasado lunes. «A uno de los borregos, cuando descubrimos lo que había pasado, ya se lo habían comido los buitres», afirmó el ganadero.
Además, durante los últimos cinco meses las cámaras de vigilancia del Gobierno de Aragón no han detectado la presencia del lobo, ni tampoco los excrementos recogidos en los controles rutinarios han mostrado evidencias.
Por ello, los técnicos del departamento de Desarrollo Rural continúan investigando a qué puede deberse este comportamiento anómalo de ataques esporádicos. La orden que se publicará en próximas fechas establece las bases reguladoras para la concesión de subvenciones para la adaptación de la ganadería extensiva a los retos ambientales y a los desafíos socioterritoriales.
