Las medidas de impulso a los medicamentos genéricos como herramienta para controlar el gasto sanitario están funcionando. El mayor avance en este terreno se ha producido durante este año y las cifras lo confirman: de enero a agosto la venta de genéricos se ha incrementado en un 41,80% frente al mismo periodo del año anterior. Esto supone ya que uno de cada cuatro fármacos comprados en las farmacias de la comunidad es por principio activo, más barato que los medicamentos de marca. Una tasa del 26,75% nada desdeñable si que compara con el 17% de hace dos años.

Este crecimiento espectacular se corresponde con las sucesivas medidas en gasto de farmacia que se han puesto en marcha desde el Ministerio de Sanidad. Aunque no hay datos sobre el ahorro concreto por el uso de estos fármacos, lo cierto es que Aragón sigue encabezando las listas en disminución del dispendio en fármacos. Las últimas cifras dadas a conocer por el Ministerio de Sanidad revelan que la comunidad gastó un 11,3% menos en el último año --desde octubre del 2010 a septiembre del 2011-- respecto al anterior. La autonomía con un nivel mayor de ahorro. Esto supone que el gasto por receta disminuyó un 12%, pasando de los 14 euros del pasado ejercicio a los 12,8 de este.

EL FUTURO ¿Aragón seguirá propulsando este tipo de políticas para reducir el gasto? "Se están analizando todas las medidas que se están proponiendo en relación con el gasto farmacéutico y se adaptarán aquellas que resulten más beneficiosas desde el punto de vista económico, intentando contar con el mayor consenso social posible", apuntaron fuentes de la Consejería de Sanidad.

Sin embargo, estas medidas no gustan a todos y, de hecho, los médicos ya han apuntado su disconformidad a tener que recetar, casi por obligación, fármacos genéricos. De hecho, una encuesta promovida por la Fundación de la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (FACME) ha revelado que el 53% los médicos encuestados considera que la prescripción por principio activo puede afectar al tratamiento de sus pacientes.

Las reticencias de los médicos no son las únicas. El sector farmacéutico también está en alerta. Sobre todo porque a partir de noviembre entrará en vigor el Real Decreto-ley en recortes en el gasto farmacéutico, que propone generalizar la prescripción por principio médico. Así, la nueva ley estima que los médicos deberán indicar genéricos.

CONSECUENCIAS Las consecuencias de estas medidas en las farmacias, asegura el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, Juan Carlos Gimeno, serán bastante duras e incluso podrían acarrear la desaparición de oficinas de las zonas rurales. "Hemos sufrido ya dos pérdidas de facturación consecutivas del 8,5% y del 7,5% por los anteriores decretos. Y Sanidad prevé ahorrar con la generalización de los genéricos 2.400 millones de euros al año que saldrán del sector farmacéutico", explica.

"Es otra vuelta de tuerca más y las farmacias más pequeñas pueden tener una afección grave, sobre todo en el medio rural", apunta. De hecho, explica, el propio decreto prevé un plan de rescate para las farmacias que tengan menos de 200.000 euros de facturación anual, de modo que se incrementa su margen profesional --el oficial es un 27,9% del precio del medicamento-- para poder seguir dando servicio.

Por eso desde la entidad colegial reclaman que este margen se incremente para todas las farmacias y no solo para las que tengan un menor nivel de facturación. "Queremos mantener la calidad del servicio, arrimar el hombro y colaborar con el Gobierno aragonés, pero si las cosas siguen así será difícil incluso mantener el personal", asegura.