--¿Dónde estaba usted el 25 de abril de 1974?

--Estaba cantando ante 700 jóvenes en Alicante. Y muchos de ellos eran portugueses.

--Nos llegó de sopetón. La revolución portuguesa de los claveles.

--Eso es; tan de sopetón que muchos de esos jóvenes portugueses salieron pitando para Portugal, temerosos de que les cerraran las fronteras.

--El creador de la canción Grandola vila Morena, José Afonso, ¿recibió toda la consideración que se merecía?

--Pues no; una vez logrado el objetivo de echar al dictador, a José Afonso le sucedió como a casi todos los cantautores en España, como le sucedió a Labordeta que lo tenéis tan cerca. Llegó la modernidad y nos convertimos en compañeros incómodos...

--¿Sí?

--Claro, y tú lo sabes tan bien como yo. De golpe nosotros les recordábamos lo que ellos no querían recordar; lo que querían echar al olvido. Ahí empezó la decadencia que ahora sufrimos. Y algunos ya vimos entonces que podía suceder todo esto que ahora contemplamos.

--¿Llegó a pensar que llegaríamos tan lejos?

--Hombre, tan lejos, no. Pero lo hemos visto en nuestros padres que sufrieron en sus carnes una crueldad extrema. Gentes sin futuro, a los que se les podía quitar todo sin preguntar, gentes acorraladas, a los que se les imponía el terror... Eso lo hemos visto todos los que tenemos una edad en nuestros padres.

--Acaba de componer una canción bellísima: ¿Qué fue de los cantautores?

--Estoy feliz con todo el disco. Se trata de reivindicar la palabra y la actitud. Yo no sé hacer otra cosa, no podría dedicarme a otro oficio en esta crisis, más que a cantar. Porque la canción me da energía para seguir adelante todos los días. Porque la canción cada día es más necesaria.

--Su canción, además, ha gozado de una gran difusión.

--En estos tiempos en que están en crisis los soportes clásicos, de pronto cuelgas una canción en internet y descubres que la escuchan cinco mil personas diarias. Eso es el milagro desnudo de la palabra. Ver esas cosas saca lo mejor de mí, mi energía más infantil para seguir luchando.

--¿Qué veremos en la Campana?

--A Lourdes Guerra y a mi cantando las canciones del nuevo disco y cosas del Fronteras del mundo, que de golpe adquiere una actualidad asombrosa. Allí hablo de estos seres que han venido de otros territorios y cómo los tratamos, que pretendemos hacerles los chivos expiatorios. Ahora, con esta crisis diabólica, nosotros somos ellos.