El pedagogo José Antonio Marina cree que en esta legislatura no se alcanzará tampoco un pacto por la educación, algo que intentó sin éxito antes de las elecciones, y confía en que sea la sociedad la que presione, porque España corre el peligro de convertirse en el "bar de copas de Europa".

"Mi idea es que no lo van a hacer, se habían comprometido a hacerlo en seis meses, pero lo único que han hecho es formar una subcomisión en el Congreso que puede ocuparse toda la legislatura en hacer poca cosa", ha explicado Marina en declaraciones a los medios de comunicación sobre el Pacto por la Educación, antes de impartir la conferencia 'Educar en el talento' en Ibercaja.

Marina ha indicado que su equipo de trabajo, el mismo que elaboró el Libro Blanco de la Profesión Docente, redactó una hoja de ruta para alcanzar un pacto educativo, donde se señalaban los puntos de conflictos y la manera de resolverlos.

Tras presentarlo a los grupos políticos, Marina reconoce que su intención era lograr ese acuerdo antes de las elecciones generales, porque sabía que después el asunto tenía "mala solución".

Para evitar que el pacto sea presentado por un partido político, algo que, a su juicio, levanta los recelos del resto de fuerzas y dificulta el proceso, Marina plantea que sea la presidencia del Congreso de los Diputados quien lo inicie o que sea una iniciativa regia, es decir propuesta por el rey, si la Constitución española lo permite.

Sin embargo, Marina teme que el Pacto por la Educación tampoco se logrará en esta legislatura y confía en que la sociedad presione a los políticos y diga: "no podemos seguir así porque estamos maltratando a nuestra gente".

"España perdió el tren de la ilustración, el de la industrialización y si perdemos el tren de la sociedad del conocimiento, podemos vernos reducidos a ser el bar de copas de Europa y eso no es un futuro muy halagüeño para nuestros chicos y chicas", ha resaltado Marina, fundador de la Universidad para Padres.

Marina, quien ha impartido una conferencia sobre el talento en la educación en el marco del ciclo '140 aniversario de Ibercaja', ha explicado que en España hay mucho camino por recorrer en este sentido, porque el sistema educativo lleva estancado en la mediocridad desde hace al menos 16 o 18 años, mientras el mundo avanza "a toda velocidad".

En este sentido, ha explicado que el talento no es lo mismo que la inteligencia, ya que con la segunda se nace, mientras el talento se desarrolla a través de la educación y afecta no sólo a la persona, sino también a una organización, a una empresa o a una sociedad.

Por último, ha reflexionado también sobre la diferencia entre buenos y malos alumnos en las escuelas españolas y ha indicado que este fenómeno, que no se da de forma tan acusada en otros países europeos, se debe en parte a que no se ha cuidado la educación diferencial.

"Hemos metido a todos los alumnos en el mismo paquete, pero cada alumno aprende de una manera determinada, a una velocidad determinada", ha comentado Marina, quien ha concluido que es el momento de abordar la diversidad.