Todo el peso de la ley ha caído sobre los hermanos Morales --Cristóbal, Miguel Ángel, Manolo y Jessica-- por el asesinato de Vanesa Barrado, en junio del 2012. La magistrada de la Audiencia de Zaragoza que presidió el jurado, Soledad Alejandre, les ha impuesto la máxima pena a todos ellos por sus comportamientos "execrables". Lamenta no solo el asesinato, sino lo que rodeó al mismo "ya que se hizo ante la presencia de la hija menor que tenía la víctima con Cristóbal, el descuartizamiento del cadáver, el hurto de sus enseres y que simularan ante los familiares de la fallecida que continuaba con vida y que se llegó a comunicar con ellos".

De este modo, la jueza impone al principal acusado, Cristóbal Morales, 24 años y medio de cárcel por asesinato, por estafa --sacar dinero con la tarjeta de la víctima-- y por hurto --robo de joyas--. Quien le ayudara a extraer de los cajeros y a tirar las bolsas de basura con el cuerpo desmembrado de la joven, Miguel Ángel Morales, cumplirá 3 años por encubrimiento.

RECEPTACIÓN Y HURTO Los otros dos hermanos, Manolo y Jessica, han sido condenados a 15 meses de prisión por el delito de receptación y hurto, respectivamente. La magistrada señala que Manolo no cometió robo ni estafa alguna, pero al vivir en la casa junto a Cristóbal, se benefició del dinero de las cuentas de Vanesa. A Jessica le reprocha que acordara con Cristóbal apoderarse de los enseres personales de Vanesa Barrado, "no solo porque participó en la venta de las joyas propiedad de Vanesa sabiendo que estaba fallecida y se benefició de ello, sino porque se quedó para su uso personal el ordenador portátil, un colgante y dos sortijas".

Todos ellos deberán hacer frente al pago de indemnizaciones por valor de 237.480 euros para la hija y la familia de la víctima --representados durante el juicio por los abogados Francisco García Berenguer y Sonia González--.

La sentencia de la Audiencia de Zaragoza sorprende por su dureza con respecto al veredicto del tribunal popular. Y es que, salvo en el caso de Cristóbal, que fue considerado culpable por todos los delitos que solicitaban las partes, el resto de los hermanos vieron cómo solo se les sancionaba por un delito y, por consiguiente, se les rebaja la pena de casi seis años de prisión a la que se enfrentaban. Al no ser firme, el fallo podría ser recurrido por los letrados defensores, Soraya Laborda, Laura Vela, Carmen Sánchez, María José Andrés y Francisco Osés.

DISCUSIÓN Este crimen ocurrió en junio del 2012 en Cadrete en el marco de una discusión por celos. Cristóbal se dirigió a la cocina, donde cogió un cuchillo y, tras noquear a Vanesa de un puñetazo, la degolló. Posteriormente la descuartizó y limpió la casa con sosa cáustica.

No quedó ahí, sino que se apropió de las joyas personales y la tarjeta de crédito de su pareja para sacar beneficio de la muerte. Fue ayudado por sus tres hermanos, si bien el único que no ganó dinero fue Miguel Ángel.