Los seis médicos afectados por la OPE que ayer se encerraron en el centro de Salud de Sagasta, de la capital aragonesa, suspendieron la protesta esta pasada noche al ser emplazados por agentes policiales a desalojar las instalaciones. Pasadas las 23:00 horas de ayer, dos vehículos policiales "han exigido a los seis encerrados que abandonaran el mismo, que ante la amenaza de ser detenidos por desobediencia a la autoridad y alteración del orden público se han visto obligados a desalojarlo", ha denunciado hoy en un comunicado la plataforma que representa a este colectivo. La plataforma ha mostrado también "su indignación por los métodos autoritarios que está utilizando la administración, que solo entiende el lenguaje de la fuerza y no muestra ni el más mínimo interés por querer dialogar y buscar soluciones al conflicto que ellos mismos han creado". Al respecto, ha avanzado que se reserva la posibilidad de emprender acciones legales contra este desalojo y que solicitará una reunión con la consejera de Presidencia, Eva Almunia, para que se pronuncie sobre la situación de estos profesionales. Los seis médicos comenzaron el encierro en torno a las 18:00 horas, arropados por profesionales sanitarios, familiares y amigos, así como ciudadanos que se han interesado por las reivindicaciones de la plataforma. Los médicos tuvieron problemas para acceder al centro, cuyas puertas estaban cerradas, "ya que el personal de seguridad tenía órdenes de que sólo una persona podía permanecer en la sala de espera", según el comunicado. La plataforma valora este hecho "como algo muy grave, porque supone impedir la entrada a un centro médico e interfiere el normal funcionamiento del mismo", y que, según el comunicado, finalmente determinó la intervención de la Policía Nacional para desbloquear la entrada.