Los médicos de Atención Primaria, a través del sindicato Fasamet, van a trasladar al Departamento de Sanidad una petición para aplazar la jubilación de los profesionales que así lo deseen. La solicitud se enmarca dentro de las dificultades que el colectivo viene denunciando desde hace tiempo para cubrir las sustituciones, algo que también está sucediendo en pleno mes de octubre, según aseguran los propios galenos.
De este modo, la ausencia de personal con permiso o licencia tiene que curbrirse con los propios trabajadores del mismo centro de salud, que deben desdoblarse. «No se encuentra sustituto para cubrir una ausencia y no queda más remedio que doblar consulta, lo que aumenta el trabajo», asegura el presidente de Fasamet, Leandro Catalán.
El problema radica, según los propios médicos de cabecera, en una «planificación inadecuada». Porque la dificultad para hacer frente a la ausencia de personal se remonta a principios de verano. «Y nadie tiene una varita mágica para que haya más médicos, por lo que creemos que, si alguien en edad de jubilarse se encuentra activo y en condiciones de continuar, aplazar su retiro podría ser una buena fórmula para ayudar a cubrir esos permisos», añade Catalán.
Además, este obstáculo afecta tanto a los centros rurales como a los urbanos. «Y nuestra preocupación aumenta si pensamos en las vacaciones de Navidad», indica el coordinador de un centro zaragozano. «Esto urge y, cuanto más lo demoremos, peor», incidió Catalán, que confía en disponer del respaldo en este asunto del Colegio de Médicos.
La cuestión se abordará el próximo martes, cuando el Salud ha citado a los sindicatos en mesa sectorial para abordar la convocatoria de oposiciones de este año, en la que se ofertarán algo más de 800 plazas a pesar de que la Administración se había comprometido a incluir las 1.483 plazas de trabajadores eventuales convertidas, el año pasado, en interinos. En este marco también se incluye la negociación del plan de recursos humanos dispuesto por el Salud.
La petición de aplazamiento de la jubilación de médicos de familia, que ya se ha regulado en otras comunidades, se produce después de que el actual consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, decidiera aplicar, sin demasiado éxito, esta medida en siete especialidades (Anatomía patológica, Anestesiología y reanimación, Cardiología, Cirugía ortopédica y Traumatología, Obstetricia y ginecología, y Radiodiagnóstico) para cubrir 62 plazas de difícil cobertura. H
