El portavoz del Gobierno y ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, insistió ayer que en el asunto de la devolución de los bienes del monasterio Sijena a Aragón por parte de Cataluña «no tiene nada que decir» y que la decisión sobre la fecha y forma del traslado únicamente es del juez.

Méndez de Vigo precisó en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, con la ambigüedad habitual que siempre muestra en este asunto, que las sentencias «se ejecutan y cumplen» y que así «lo harán» pero «teniendo en cuenta también que estas son cosas que muchas veces requieren un tiempo para que esos bienes, que son unos bienes preciosos, no sufran deterioro».

Recordó que el juez le envió un «requerimiento personal» que le llegó hace diez días en el que le pedía «una serie de datos» tales como el lugar donde se encontraban, su nivel de protección y las condiciones de seguridad previstas para el traslado, entre otros. «Contesté inmediatamente al juez diciéndole que las sentencias hay que cumplirlas y que, por tanto, daría orden de que se cumpliera y al mismo tiempo dije a la consejería de Cultura que diera respuesta a la serie de preguntas que me hacía el juez», expresó.

Además hizo referencia a que la providencia que fija la fecha de devolución para el lunes es un asunto ante el que únicamente tiene competencia el juzgado de Huesca que la ha firmado.