Casi todo eran caras largas ayer en el colegio San Jorge, en el zaragozano barrio de Valdespartera. Alrededor de medio centenar de personas asistían a la realización del sorteo destinado a dirimir los empates entre las solicitudes empatadas a puntos para escolarizar, en septiembre, a niños de 1º de Infantil. Pero apenas hubo sonrisas cuando el director, Iván Ruiz, dio a conocer el número de la suerte, el 11. Porque, de las 75 vacantes que oferta el centro, 65 están ya adjudicadas a hermanos de niños ya escolarizados en el centro y que, según la normativa, obtienen una mayor puntuación de cara a asegurar la presencia de ambos en el mismo colegio. Por eso, el acceso a San Jorge se antoja lo más parecido a una misión imposible.

«Ya nos dijeron, en la jornada de puertas abiertas, que apenas habría cinco o seis plazas porque el resto ya estaban asignadas entre los hermanos y otras pertenecientes a familias numerosas», lamentaba Manoli, que, junto a su hija Nuria, criticaban la planificación en la zona. «Cuidamos dos nietos, uno de cada hija, y cada uno va a un colegio porque una vive en esta zona y la otra en el lado opuesto del barrio, por lo que ha solicitado el colegio Montecanal para que mi marido pueda llevar a uno y yo al otro, pero están haciendo los colegios nuevos allá abajo y aquí -por la zona donde se ubica el San Jorge- nada».

Por eso, la familia apenas prestó atención al número del sorteo. «Los que solo trabajan no tienen derecho a nada. Entre hermanos, familias numerosas, minusvalías y demás, hay impedimentos por todos los lados. No dejan de promocionar la escuela pública y todos los centros que hemos pedido son públicos, pero a ver dónde nos mandan ahora».

Rosa, por su parte, asume que su hijo acabará en el Valdespartera 4 -en Recarte y Ornat hasta que esté construido-. De hecho, ya lo tenía claro antes del sorteo, que, por cierto, también le fue mal. «Mi número está muy lejos, así que espero entrar en el Valdespartera 4, que puse como segunda opción, pero a ver cómo lo arreglan porque todavía deben explicar bien cómo se gestiona la línea de transporte o el comedor», expuso.

Rosa también se quedará fuera del único centro que tiene «cerca de casa». «Incluso el Valdespartera 4 me queda muy lejos, pero así está planificado todo», lamentaba.

Mientras, Javier cogía el móvil para comunicarle a su hija el resultado del sorteo. Pero, en realidad, no tenía del todo claro si estaba en el lugar correcto. «En la solicitud está primero el Valdespartera 3 -donde entrarán todos en aulas puente ubicadas en Zaragoza Sur-. Es este, ¿no?, preguntaba».