Una montañera catalana de 35 años, F. P. S., perdió la vida ayer al precipitarse 15 metros cuando se hallaba en la Cresta del Alba, en el término de Benasque. La mujer, que residía en Palafrugell (Gerona) sufrió politraumatismos varios, por lo que el equipo de rescate de la Guardia Civil, con base en Benasque, no pudo hacer nada por ella. Otro montañero que se hallaba con la víctima mortal, C. A. R., de 46 años, resultó ileso, según indicaron fuentes de la Benemérita.

El accidente se produjo sobre las 11.30 horas y el dispositivo de salvamento se activó de inmediato al recibir una llamada de auxilio en el 112 de Protección Civil.

No fue el único suceso que registraron ayer las montañas de Huesca. Sobre las 17.00 horas, una mujer de 60 años y residente en Madrid, M. B. G. B. S., sufrió una caída que le ocasionó un traumatismo craneal, así como diversas contusiones, cuando se encontraba en Palesta de Ampriú, también en el valle de Benasque. Fue evacuada en helicóptero a un centro sanitario.

Además, sobre las 10.30 horas, otro montañero catalán, M. C. F., sufrió una posible fractura de tobillo cuando se hallaba recorriendo el barranco de Miraval, en el municipio de Tella-Sin, en el Sobrarbe.

En lo que va de año, 17 personas han perdido la vida en accidentes de montaña en el Pirineo y en Guara, mientras que un excursionista desapareció la pasada primavera en Bujaruelo y todavía no ha sido localizado. Ocho de los accidentes mortales se han registrado desde junio y el resto, en la pasada temporada invernal.