El ministro Cristóbal Montoro, ha convocado de urgencia a los representantes autonómicos en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) el próximo viernes a primera hora, para anunciarles que elevará una décima, hasta el 0,4% del PIB, el objetivo de déficit de las comunidades para el 2018, según anunció ayer el propio titular de Hacienda. La convocatoria se produce apenas seis días después de la anterior reunión del CPFF, el jueves pasado, en la que todas las comunidades gobernadas por socialistas y Cataluña votaron en contra del objetivo de déficit del 0,3% del PIB asignado entonces por Hacienda a estas administraciones para el 2018.

El consejero de Hacienda aragonés, Fernando Gimeno, fue contundente a la salida de esa reunión, al asegurar que «Aragón no puede consentir que entre este año y el siguiente se le obligue a rebajar el déficit el 50%» mientras el presidente de Ciudadanos y el ministro de Hacienda «están discutiendo sobre cuándo reparten las zanahorias de la bajada de ingresos», en alusión a las negociaciones para aprobar el techo de gasto. «No es leal», insistió Gimeno, «que estén hablando de una disminución de ingresos, que repercute directamente en el déficit de las comunidades autónomas».

Gimeno se mostró de acuerdo con la existencia de un objetivo de déficit, pero insistió en la importancia de «distribuirlos entre las comunidades y el Estado».

negociación política / La decisión anunciada ayer por Montoro supone elevar una décima los objetivos de déficit autonómicos del 2018 y el 2019 (hasta el 0,4% y el 0,1%) y desplaza el equilibrio presupuestario al 2020. «Nuestra propuesta es fruto de la negociación política» dijo antes de participar en un almuerzo informativo organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), en una velada alusión a los contactos con Nueva Canarias. De paso, el Gobierno busca el apoyo de las autonomías socialistas al nuevo objetivo de déficit.

Este mismo lunes, el Consejo de Ministros acordó un reparto del objetivo de déficit del 2,2% del PIB para el 2018 que asignó 0,7 puntos al Estado; 0,3 a las autonomías; 1,2 puntos a la Seguridad Social y equilibrio presupuestario, para las corporaciones locales.

Ahora, el Gobierno propone asignar una décima más a las comunidades (hasta el 0,4%) a costa de reducir el objetivo de la Seguridad Social (al 1,1%), porque considera que la mejora de la economía y el incremento de afiliados permitirá un mejor desempeño del sistema público de pensiones. Esta proyección contradice las previsiones de la Autoridad Fiscal Independiente (AIReF) que estima un déficit estructural de la Seguridad Social en el entorno del 1,8% del PIB.

CLAVE POLÍTICA / La retirada del proyecto de ley solo dos días después de su aprobación por parte del Consejo de Ministros supone un fuerte varapalo para el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que estos días está siendo cuestionado desde numerosos frentes mediáticos y por parte del PSOE, que se niega a negociar con él los Presupuestos del 2018 después de haber sido reprobado por el Congreso de los Diputados por la amnistía fiscal. Las comunidades socialistas valorarán el impacto que tienen en sus arcas públicas la nueva oferta que ayer se sacó de la manga, de forma inesperada, el ministro.