Capacidad para cien usuarios y atención personalizada garantizada por la norma de calidad ISO 9001:2000. Son algunas de las características de la nueva residencia Santa Isabel, ubicada en el barrio del mismo nombre, que fue inaugurada ayer por la consejera de Servicios Sociales y Familia Ana Fernández. El centro, perteneciente a la Fundación Federico Ozanam, está dirigido a personas mayores con diversos grados de dependencia psíquica o física, si bien el 70% de las plazas estarán destinadas a dependientes severos.

El centro se compone de dos plantas; en la primera se encuentran entre otras las áreas comunes, las salas de terapia ocupacional y fisioterapia, el gimnasio, y la peluquería además de 22 habitaciones, de las cuales 18 son dobles y 4 individuales. En la planta superior se ubica el resto de dormitorios, de los cuales 24 son dobles y 14 individuales. "Esto permite que los usuarios estén más atendidos a nivel de privacidad", indicó Enrique Santamaría, presidente de Ozanam

El centro dará una atención integral a los usuarios, para lo que se aplicará el protocolo de calidad basado en seis pilares fundamentales, según explicó la directora del centro Isabel de Miguel. Un equipo disciplinar que aportará diversas opiniones sobre el paciente que va a ingresar. Antes de que este lo haga le será designado un tutor que presentará la acogida y hará un seguimiento durante 15 días para comprobar su adaptación.

Durante ese periodo se realizará una valoración gerontológica, que derivará en un Plan de Atención Individualizada para definir cuáles son los objetivos terapéuticos, rehabilitadores y sociales para cada usuario. Éste se revisará a los seis meses para adaptar las estrategias asistenciales a los cambios que se puedan originar en el paciente. Durante todo el proceso, el tutor está en contacto con las familias de los residentes para explicar las valoraciones y planes de actuación y acordar la ejecución o no de los mismos. "La atención no va solo dirigida al paciente sino también a la familia, cuyo estado de ánimo tiene una gran importancia", señaló de Miguel.

Un equipo de 45 personas trabajará en esta residencia, que empezará a acoger sus primeros usuarios el lunes y recibirá el año nuevo con la mitad de sus plazas ya ocupadas. A este respecto, la lista de espera para ocupar una vacante alcanza ya las 400 personas, pues como señaló Santamaría, "en Zaragoza existe una carencia de plazas para personas mayores con deterioro físico y mental que precisen atención integral". Ana Fernández reiteró por su parte esta necesidad e indicó que con el aumento del presupuesto de su departamento para el 2009 en un 34%, "las personas mayores seguirán siendo el centro de atención".