Nueve personas, tres de ellas menores de edad, han sido detenidas e imputadas por cometer 32 robos con fuerza en trasteros durante los últimos tres meses, en los que se han visto afectados un total de 80 trasteros de los barrios zaragozanos de Actur, Arrabal, La Jota y San José. El arresto de los presuntos integrantes de un grupo organizado dedicado a robar en trasteros de edificios situados en esos barrios ha corrido a cargo de agentes de la Comisaría de Distrito Actur-Rey Fernando, en colaboración con el Grupo de Menores, ha informado la Jefatura Superior de Policía de Aragón.

La mayor parte de los hechos fueron perpetrados en el Actur, barrio en el que residen muchos de los presuntos delincuentes, una zona que además era su punto de reunión, en concreto en un local situado en los bajos de un edificio, que también ha sido localizado por los investigadores y cuya puerta de acceso ya ha sido tapiada por los propietarios del mismo. El principal objetivo de los autores de los robos eran las bicicletas de alta gama, que los ciudadanos suelen guardar en los trasteros, debido a su fácil "salida" en el mercado clandestino, si bien también sustraían otros objetos que eran de su interés tales como herramientas o incluso alimentos, han agregado las mismas fuentes.

Los investigadores, tras detectar un preocupante aumento de este tipo de delitos, realizaron numerosas gestiones que les permitieron constatar la existencia de un grupo de jóvenes que podría dedicarse a vigilar las inmediaciones de los edificios donde posteriormente se cometían los robos, para de esta manera detectar a ciudadanos que accedían a la zona de garaje conduciendo bicicletas de elevado valor. Con posterioridad, y aprovechando la salida o entrada de vehículos, se introducían en los garajes y forzaban las puertas de los trasteros para de esta forma cometer el delito.

Las laboriosas gestiones realizadas permitieron a los policías de la Comisaría de Distrito Actur-Rey Fernando conocer la composición del grupo de delincuentes y determinar que todos ellos eran autores de robos en trasteros. Además de que no siempre cometían los delitos en subgrupos fijos, es decir, los autores de los hechos iban cambiando según las posibilidades que tuviera cada uno de ellos en un día determinado, por lo que prácticamente todos ellos ha cometido algún delito en compañía del resto de los componentes del grupo.

De esta manera todos ellos tenían conocimiento de los delitos cometidos por los demás aunque ellos no hubiesen participado directamente en los hechos. Durante la comisión de los delitos había un reparto de funciones, puesto que mientras unos forzaban las puertas de los trasteros otros realizaban labores de vigilancia y, una vez que tenían las bicicletas sustraídas en su poder, procuraban venderlas en el mercado negro lo más rápidamente posible.

Tras la culminación de este servicio, los investigadores esperan una drástica reducción de este tipo de delitos, si bien y como resultado práctico de todas las investigaciones realizas aconsejan no guardar en los trasteros bicicletas u otros objetos de elevado valor y comprobar que mientras las puertas de acceso a los garajes estén abiertas no acceden a los mismos personas ajenas al edificio. Es de destacar la importancia de la colaboración ciudadana en la desarticulación de este grupo de delincuentes, ya que el testimonio de algunos vecinos de los edificios afectados ha sido vital para la detención de los autores de los robos. La operación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones, han subrayado las mismas fuentes.