El consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, se reunió ayer con los colegios de médicos de las tres provincias de la comunidad para presentarles las medidas de su plan estratégico para el Salud. El encuentro fue el primero de una serie de contactos que mantendrá con agrupaciones relacionadas con la sanidad aragonesa. El siguiente será con los sindicatos y tendrá lugar el 15 de febrero.

"Este es un colectivo directamente implicado y con muchas responsabilidades", señaló el máximo responsable del Salud. Oliván aprovechó la oportunidad para ensalzar "la labor y compromiso" de los jefes de servicio de los hospitales para que "las medidas se lleven a cabo". Según el consejero dicha figura es "clave para poner en marcha las medidas que oportunas para mejorar la sanidad aragonesa".

Por su parte, los facultativos se mostraron dispuestos a colaborar con la DGA para llevar a cabo las reformas en el Salud. "Quiero hacer patente la máxima colaboración de los colegios con la consejería", sostuvo el presidente del Colegio de Médicos de Zaragoza, Enrique de la Figuera. Tanto él como Ismael Sánchez, presidente del colegio de Teruel, como Ignacio Domínguez, su homólogo oscense, coincidieron en que la figura del facultativo es clave para impulsar los cambios.

"El médico es fundamental en el sistema", explicó Sánchez, "y tiene que aprovechar la crisis para realizar o liderar las reformas que necesita el sistema". Además, propuso un acuerdo a nivel nacional semejante de la DGA.