El consejero de Desarrollo Rural del gobierno aragonés, Joaquín Olona, ha ordenado la retirada del borrador del plan de protección de la rana pirenaica tras las críticas surgidas en distintos ámbitos locales y políticos de la provincia de Huesca.

Olona ha considerado "innecesaria y un poco exagerada" la polémica surgida en torno al borrador del documento, aunque ha admitido al tiempo que cuando "a todo el mundo le parece mal" su interpretación es que "no puede estar bien", informa el gobierno aragonés en un comunicado.

Ha destacado que, en cualquier caso, el documento cuya retirada ha ordenado no constituía más que un borrador que había remitido para ser consultado por los ayuntamientos situados en el ámbito de actuación del plan.

Tras las críticas surgidas, ha asumido que no se puede elaborar una política de conservación basada exclusivamente en criterios científicos y técnicos.

La protección de esta especie protegida, ha añadido, constituye un proceso complejo a abordar tanto desde un punto de vista de política medioambiental como de criterios científicos y técnicos que determinen su necesidad.

Ha admitido que este proceso debe favorecer una participación de los agentes afectados e interesados "mucho más eficaz" que el llevado a cabo con el borrador retirado.

"Que quede claro- ha advertido a renglón seguido- que en absoluto vamos a renunciar a la protección de la rana pirenaica o de cualquier otra especie que haya que proteger".