En la reciente cumbre sobre el cambio climático, Patricia Espinosa, máxima responsable del tema en Naciones, Unidas, fue tajante: "La eliminación del carbón como fuente de energía es una prioridad. Es el principal generador de CO2 del planeta". Se llevan años pidiendo en todo el mundo reducir la participación del carbón en el mix energético mundial. Pero aquí se juega a dos bandas. El Gobierno de Rajoy permite que todo siga igual, sin un plan energético y sin hablar del carbón. Y el Gobierno de Lambán critica la acción ministerial, pero su partido, el PSOE, apoyó una moción que condena a la desaparición del carbón frente al gas. Dobles y endebles lenguajes.