Un trabajador de 55 años falleció ayer como consecuencia de una explosión que se produjo en una estación de servicio del polígono industrial de San Miguel, en Villanueva de Gállego. El accidente, debido a una acumulación de gases, se produjo cuando el operario, de una empresa de mantenimiento, se hallaba realizando labores de soldadura en la boca del depósito de combustible, que había sido vaciado. Además, otro trabajador que se encontraba con el primero resultó herido, aunque otras fuentes dijeron que resultó ileso.

Se da la circunstancia de que la estación de servicio se halla situada justo al lado de un bar restaurante, cuyo personal y clientes no sufrieron daños.

La deflagración se produjo sobre las 12.30 horas y fue tan violenta que proyectó el cuerpo del soldador al aire, a una altura de unos 40 metros, según relató un testigo. El trabajador se precipitó posteriormente sobre el tejado de la nave contigua, situada a unos 20 metros del suelo. Este hecho obligó a que los bomberos de Zaragoza emplearan una grúa con brazo articulado para recuperar el cadáver, una labor que no terminó hasta las cinco y media de la tarde.

BÚSQUEDA

Fuentes de los Bomberos de Zaragoza indicaron que el accidente laboral, el cuarto que se produce en Aragón desde que empezó el año, será investigado para determinar si pudo cometerse alguna imprudencia o incumplimiento de las medidas de prevención de riesgos laborales. «En el depósito había vapores de gasolina o de gasoil y se ha registrado una mezcla explosiva», añadió el portavoz de los equipos antiincendios.

Óscar, que se hallaba tomando café en el bar contiguo a la estación de servicio, oyó la explosión y notó cómo «temblaba todo el local». «La tapa del depósito ha salido volando, y también unos tubos, y nos hemos quedado todos paralizados», relató este testigo.

Otra persona que se hallaba en la zona señaló que sonó «un petardazo» y que inmediatamente se produjo una caída de cascotes, al tiempo que salía una llamarada «de medio metro o un metro» de la boca del depósito. «Estábamos a punto de salir del bar cuando se ha producido la explosión», afirmó.

Las labores de recuperación del cadáver fueron de gran complejidad. La violencia de la explosión había diseminado el cuerpo del trabajador, por lo que fue preciso establecer un área de seguridad para la búsqueda de los restos.

CUARTO ACCIDENTE

Los sindicatos fueron ayer unánimes en la denuncia de lo que consideraron un «día negro» para la siniestralidad laboral en Aragón, dado que en Valeo Térmico falleció otro trabajador por un problema cardiaco. José de las Morenas, de UGT, afirmó que lo sucedido en Villanueva de Gállego puede poner de manifiesto «un problema de coordinación», dado que las labores de soldadura deben realizarse previa comprobación de la existencia de gases y vapores, entre otras medidas.

Para CCOO, que emitió un comunicado, ambos siniestros pueden ser «consecuencia de no efectuar correctamente la acción preventiva y de la falta de medidas de seguridad en los centros de trabajo».

El pasado año se registraron en Aragón 25 accidentes mortales en el ámbito laboral. Quince de ellos fueron de carácter traumático y 10, el 25%, por motivos diferentes.

«Se trata de ictus, infartos y otros problemas de salud», explicó De las Morenas, que hizo hincapié que este segundo tipo de sucesos apuntan a una supuesta «mala organización del trabajo».

MAL REGISTRO

El responsable de Prevención de UGT hizo un llamamiento a las empresas para que extremen las medidas de prevención y las medidas relacionadas con la salud laboral de las plantillas.

De las Morenas se refirió a que los cuatro muertos laborales registrados en lo que va del 2017 en la comunidad aragonesa son un mal registro cuando solo ha pasado un mes de año.