El pleno del Ayuntamiento de Zaragoza evidenció ayer la posición política de los partidos a propósito de la denuncia por 17 intervenciones de la Policía Local contra los manteros en la ciudad. Todos manifestaron que si se prueba una conducta ilícita de los agentes, se actúe «con contundencia», pero el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) no goza de la confianza de la oposición, que ayer cuestionó su imparcialidad y también su independencia para investigar este expediente de información reservada que está llevando el área de Personal.

PP, PSOE, Ciudadanos y CHA rescataban dos precedentes. Uno, las recientes declaraciones del responsable de esta área, Alberto Cubero, trasladando su «solidaridad» a los jóvenes de Alsasua acusados de agredir a dos guardias civiles. El segundo, que el alcalde llevara en el 2015 a Fiscalía otro expediente de información reservada, sobre Ecociudad, basado en testigos que luego, delante del juez, se desdijeron de sus denuncias. Y, además, por el apoyo de ZeC a las fiestas organizadas contra la «represión» policial.

La responsable de Policía Local, Elena Giner defendió que sus logros «desmontan ese mantra de que estamos contra ella». Pero el resto pidió un proceso «garantista» para los agentes, a la vez que se dio un reconocimiento unánime a la labor de un cuerpo que «no puede ser un juguete roto en manos de un Gobierno que va a la zozobra». Porque «en este ayuntamiento los expedientes de información reservada los carga el diablo», añadieron.

VOTACIÓN

Por otro lado, la plantilla de la Policía Local rechazó en la votación la propuesta de cambio de calendario que habían apoyado el sindicato mayoritario CSL, CCOO y UGT. La rechazó teniendo en cuenta los postulados de la votación, que la daba como válida si apoyaban el proyecto tanto las unidades afectadas (motoristas y sectores, principalmente) como el resto. Y mientras en la urna de las primeras la participación fue masiva (90%) y el apoyo mayoritario (271 síes y 154 noes), del resto de la plantilla apenas votó un 58%, y ganó el no por 177 a 146 votos.

La votación se perdió, pero CSL apostó por seguir negociando con Giner, teniendo en cuenta el apoyo mayoritarios entre los afectados y la diferencia global a favor de la reforma, de 417 a 331 votos. CCOO se reunirá con ellos el lunes para debatir una postura común, y otros sindicatos que ya se retiraron de la propuesta, como CSIF, apuestan por retrotraer la negociación.