El Papa Francisco nombra hoy cardenal al turolense Juan José Omella en la Basílica de San Pedro en el Vaticano. Es el nuevo miembro del colegio cardenalicio con potestad para participar en el cónclave papal al tener menos de 80 años de edad.

Desde el 2015 ocupa el cargo de arzobispo de Barcelona aunque sus orígenes son del municipio de Cretas, en la provincia de Teruel. Se formó en el Seminario de Zaragoza y estuvo «un año de misionero en Zaire y 20 como cura de pueblo hasta que me llamó el obispo para ser vicario episcopal y terminé de obispo. Pero no me lo imaginaba», confesó.

A sus 71 años, «el arbolito ya está hecho y difícilmente voy a cambiar. Voy a ser el mismo», señaló. «Mi secretario me dice que no lleve cartera pero es imposible. Si la he llevado siempre ahora no va a cambiar», bromeó el turolense.

Con el nombramiento de Omella y de otros cuatro obispos como cardenales, el Colegio Cardenalicio de la Iglesia Católica estará formado por 227 cardenales, aunque solo 70 podrían participar en un cónclave.

Omella es el tercer aragonés que ocupa dicho cargo. En el año 2014, el Papa Francisco designó al bilbilitano, Fernando Sebastián y, en el 2012, el turolense, Santos Abril, natural de Alfambra, también entró a formar parte del Colegio Cardenalicio, el veterano de los aragoneses.