El presidente del PAR, José Ángel Biel, calificó a los que piden el congreso en la formación como "pepitos grillo". No andaba desencaminado. Las tripas del partido que comanda son ahora mismo una jaula de grillos. Pero cuando el líder asoma la cabeza todos quedan mudos. Solo Javier Allué se atrevió esta semana a plantear de forma abierta la necesidad de convocar el cónclave. Alfredo Boné lo apoyó --algo inédito hasta hace bien poco-- invitando a la autocrítica. La ejecutiva en la que por fin alguien plantó cara a Biel tuvo ciertas reminiscencias de la última etapa de José María Mur, cuando era el actual presidente el que tenía prisa para que se convocara el congreso. Finalmente se hizo y ganó José Ángel Biel.
Zaragoza
Ahora es Javier Allué el que alza la voz. Sin demasiada contundencia para que no rueden cabezas. La suya concretamente. ¿Por qué lo hace en este momento? Porque sabe que dentro del partido es el más fuerte. Controla toda la provincia de Zaragoza, incluida la capital. Con tres aliados clave. El primero, y más importante, Máximo Ariza, que lleva años trabajando a pico y pala, pueblo a pueblo. Y se ha ganado a alcaldes y concejales. Es el mejor fontanero posible para Allué. La segunda pata del pacto es Juan Antonio Sanmiguel, que centra su dominio en Calatayud y su entorno más inmediato. El tercero es Alberto Contreras que tiene en su poder las agrupaciones de Zaragoza. Es un grupo sin fisuras. Su fuerza quedó patente el pasado fin de semana, cuando congregaron a más de 500 ediles. Nadie tiene ahora mismo esa capacidad. ¿Pero es suficiente para ganar un congreso? Puede, pero tendrían que buscar aliados.
Huesca
Si miran al norte, a Huesca, se encuentran con la familia de Arturo Aliaga, secretario general del PAR y titular del departamento de Industria, que domina buena parte de la provincia. No toda. Roque Vicente, por ejemplo, está del lado de Javier Allué en su territorio. Antonio Ruspira se encuentra a medio camino entre el apoyo a Alfredo Boné y al consejero. Joaquín Serrano es un fiel aliado del actual número dos del partido. Está por ver si Aliaga optaría a presidir el partido o no. La realidad es que siempre se ha mostrado más cómodo en la gestión que en los asuntos orgánicos del partido. Y en este momento no quiere desvelar su futuro.
Teruel
El sur, Teruel, siempre ha sido territorio de José Ángel Biel. Sobre todo el Bajo Aragón, gracias a proyectos como Motorland que el actual presidente ha sabido apadrinar con habilidad. En la capital la situación del partido es más incierta por no decir caótica. No hay líderes claros. Ante una eventual ausencia de Biel como candidato --algo que todavía no está claro-- sería Alfredo Boné el que recogería el caudal de apoyos. El también portavoz en las Cortes ha recuperado algo de terreno, apuntan desde su entorno, a base de discurso. Le queda por delante hacer trabajo de campo. Pero el caso es que el Parlamento le ofrece una plataforma mediática envidiable.
¿Y Biel?
¿Y qué pasa con José Ángel Biel? De momento juega al despiste. Y al desprecio con los que piden un congreso. Su apuesta es clara, Xavier de Pedro, presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, al que el presidente del PAR intenta proyectar a toda costa. Sus apariciones en la televisión autonómica son constantes, por ejemplo. Pero los apoyos en el seno del partido, escasos. La suya sería una designación a dedo, con un padrino inmejorable, pero sin apenas respaldo.
