El director general de Movilidad del Gobierno de Aragón, José Gascón, decidió ayer paralizar las obras que se llevan a cabo en la A-132 en Murillo de Gállego, utilizada como alternativa temporal tras el hundimiento de un tramo del puerto de Monrepós, tras las denuncias de la coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos de que los desprendimientos, caídos a la calzada el pasado domingo, se estaban arrojando al río.
La entidad acusó a la empresa de las obras de cometer una ilegalidad puesto que las máquinas que trabajaban a la altura del kilómetro 41 estaban tirando los restos de los derrumbes al cauce cuando deberían ser recogidos con un camión.
Según la coordinadora, esta actuación, que también se produjo el domingo, podría cortar el caudal del río y afectar a los aficionados al ráfting que bajan en balsa por los rápidos del río Gállego.
Por estos hechos la coordinadora anunció que pondrá denuncias ante la Guardia Civil, Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y los servicios forestales.
SALIDA DE VÍA / El Gobierno de Aragón negó ayer que se estuvieran arrojando las rocas al río y aseguró que lo que se intentaba era apartar las piedras en la ladera para su retirada posterior. No obstante, debido a la situación de tensión que se ha creado con los vecinos la dirección de Movilidad decidió parar temporalmente estos trabajos.
Para la coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos, se trata de «una actividad ilegal», dado que los escombros «deben ser recogidos con camión».
«La empresa está incumpliendo la legalidad y ha amenazado a la persona que ha ido a indicarles que no debe hacerse», manifestó la entidad en una nota. En su opinión, la semana pasada ya se tiraron rocas al río «y esto es inadmisible».
Por otro lado, la A-132 fue escenario a las tres de la tarde de ayer de un accidente de tráfico muy cerca del lugar del desprendimiento, en el kilómetro 43,3. En este punto se salió de la vía un camión articulado cuyo conductor resultó ileso.
Como consecuencia del accidente, uno de los carriles de la calzada quedó cortado y fue necesario dar paso alterno a los numerosos vehículos que utilizan esta vía desde el cierre de Monrepós. Esta situación duró hasta las 19.50, hora a la que se restableció la circulación por ambos carriles.
