"Es una victoria de la ciudadanía", valoró Pál Csaky, presidente de la delegación parlamentaria y de la misión exploratoria del Ebro y del Tajo, sobre el resultado de la votación que ayer por la mañana dio la razón a las quejas lanzadas desde la Plataforma en Defensa del Ebro y del Tajo. Con 22 votos a favor y 9 en contra, el informe pone de relieve que el Plan Hidrológico del Gobierno en funciones para la cuenca de Ebro no cumple con los requisitos medioambientales de la Directiva marco sobre el agua, y por tanto, quebranta la normativa europea.

La plataforma ciudadana logra así el apoyo de la comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, que urgió a la Comisión Europea a rechazar el plan hidrológico español, que se aprobó en enero de este año con el gobierno de Mariano Rajoy ya en funciones. "Durante nuestra visita a España pudimos comprobar que la gestión del agua y su escasez es un problema creciente en el país", admitió Csaky sobre el resultado de la visita que hicieron en febrero de este año. "Lo que pretende la comisión de peticiones con este informe es contribuir a una solución aún cuando las medidas concretas para mejorar la situación deben ser adoptadas por las autoridades regionales y nacionales", añadió.

Los eurodiputados del PPE, PSE y Liberales consiguieron a última hora suavizar las críticas al Gobierno al pactar una enmienda de compromiso que suprime la primera recomendación que recogía el informe. Es decir, el llamamiento a cambiar completamente el modelo de gestión de los recursos hídricos y a dar prioridad a los requisitos medioambientales por encima de los socioeconómicos.

Aunque la mayor parte de las 36 enmiendas presentadas al proyecto de informe han sido rechazadas, sí se aprobó una enmienda conjunta crítica promovida por los eurodiputados Javier López (PSOE), Marina Albiol y Ángela Vallina (IU) Ernest Urtasun (ICV), Ramon Tremosa (CDC), Josep Maria Terricabras (ERC) y el eurodiputado de Nova Esquerra Catalana, Ernest Maragall, en la que se reclama a la Comisión Europea que "rechace el segundo ciclo de planes hidrológicos de cuenca presentado por el Gobierno español" porque no abordan "todas las deficiencias identificadas por la Comisión en marzo del 2015" y por tanto no cumplen la directiva marco sobre agua. Estos eurodiputados también promovieron otra enmienda conjunta en la que reclaman que "el caudal ecológico", en línea con las disposiciones de la directiva marco de agua, "debería ser suficiente para lograr una conservación favorable del estado de los hábitats naturales y las especies de la Red Natura 2000".