El presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, se comprometió ayer con alcaldes de la Ribera Baja a abrir de manera permanente el parque de bomberos de El Burgo de Ebro. Desde hace dos décadas solo se activa en verano, por lo que la zona se cubre desde Caspe, La Almunia y Cariñena. «La alta siniestralidad de la zona zaragozana, por la existencia de empresas e infraestructuras, como la N-232, la A-2 y la AP-2, aconsejan contar con personal de extinción de incendios allí de forma continua», señaló Sánchez Quero.