Pablo y Arturo demostraron ayer que los 17 años de trabajo que lleva a cuestas Autismo Aragón en la comunidad han dado sus frutos. Con un piano adaptado y junto a una de sus psicoterapeutas, los dos jóvenes interpretaron el adagio del Concierto de Aranjuez en una emotiva actuación, que sirvió como colofón a la presentación de la ampliación de las instalaciones de la sede de la entidad en la calle María Montessori, el zaragozano barrio del Actur.

Una puesta de largo a la que no faltó nadie. El equipo formado por Pablo y Arturo despertó la sonrisa de la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, y de otras muchas autoridades que no quisieron perderse la visita. También hubo lágrimas. Y es que la emoción caló en muchos al ver la coordinación y buena ejecución de dos chavales que sufren una discapacidad que les hace enfrentarse a un día a día complicado.

Fue un grupo de familias el que en el año 1998 fundó la fundación con el ánimo de romper las barreras para las personas con autismo. Ahora son 130 personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) y sus familias las que reciben asistencia en este centro que acaba de finalizar sus obras de ampliación.

El local de 400 metros cuadrados fue cedido por el Gobierno de Aragón pero las obras han corrido a cargo de la propia entidad con apoyos diversos de otras organizaciones y particulares. Con la remodelación han conseguido ampliar sus servicios de intervención temprana para niños con autismo de 0 a 6 años, así como dar mayor cobertura a programas de psicomotricidad y habilidades sociales. Estos se suman a la oferta ya existente en el centro de apoyo psicológico, musicoterapia, ocio y tiempo libre.

Cromaterapia

La cromaterapia y los espacios multifuncionales son las líneas que han guiado el diseño de las nuevas instalaciones que permitirán seguir dando "pequeños pero muy importantes pasos para la situación de vida de las personas con autismo", tal y como explicó la presidenta de Autismo Aragón, Pilar Sánchez Berrozpe, que agradeció el apoyo brindado por el Gobierno de Aragón, la entrega diaria de sus trabajadores y el "impagable" apoyo de los voluntarios. Recordó de manera especial al exalcalde de la ciudad, José Atarés, quien cedió el primer "cobijo" a la asociación en el 98.

Rudi reconoció que las familias de las personas con discapacidad siempre "han ido por delante de las adminitraciones", al tiempo que dijo que desde el Ejecutivo siempre "intentan cumplir con su obligación" en este sentido, aunque los recursos "no han sido los mejores posibles" estos cuatro años.