El PP sacó ayer adelante por unanimidad una propuesta en la que solicita que la valoración del grado de dependencia a pacientes de salud mental la realice personal «específicamente formado y en coordinación con los facultativos responsables». La Comisión de Sanidad aprobó la iniciativa por unanimidad, que incluye también coordinación con el Departamento de Derechos Sociales para desarrollar esta iniciativa.

Según la diputada popular Rosa Plantagenet-White, los equipos de valoración de la dependencia «no están adiestrados en salud mental», y, por ello, «los enfermos se están quedando fuera de las ayudas», dijo. «Los pacientes no acceden a una serie de recursos por las dificultades de tipificarlos, ya que valorar las limitaciones es difícil, porque tienen unas condiciones muy específicas», señaló. Itxaso Cabrera, desde Podemos Aragón, realizó una enmienda, ya que «parece, por las palabras de la iniciativa, que ponen en entredicho la profesionalidad de los trabajadores», dijo.

Por su parte, Berta Zapater (PAR) apuntó que «uno de los mayores errores del Gobierno de Aragón fue separar las consejerías de Sanidad y de Servicios Sociales». La portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, apoyó la iniciativa. Carmen Martínez, desde el Grupo Mixto, se alegró de la «sensibilidad» del PP con los dependientes, y rogó «que se la hagan directamente a Mariano Rajoy», apuntó.