La actividad inspectora que, desde hace dos años, lleva a cabo la DGA ha llevado al cierre a 20 residencias aragonesas. Las tres últimas que han cesado su actividad lo han hecho a lo largo del último mes en Utebo por no poder adaptarse a la normativa ni cumplir las prescripciones del plan de regularización iniciado en el año 2016.

Estos centros no podían adaptarse a la normativa en materia de incendios, evacuación y medidas de seguridad de las instalaciones, por lo que se unen a los 17 centros que ya habían cerrado anteriormente al no poder cumplir los requisitos para obtener las preceptivas autorizaciones. En total, pues, 20 centros de atención a mayores en la comunidad ya han cerrado por este motivo.

Además, fuentes del Ejecutivo indicaron que también se encuentran en tramitación cuatro expedientes que pueden dar lugar a una resolución acordando el cierrre del establecimiento, en función de las alegaciones y de las acciones que puedan proponer los titulares.

El plan se puso en marcha una vez llevadas a cabo una serie de actuaciones de urgencia que se emprendieron con motivo del incendio, en julio del 2015, de una residencia en Cuarte que costó la vida a ocho ancianos.