Una de las charlas celebradas ayer consistía en dar a conocer el denominado Plan Estratégico Estatal de la Bicicleta (PEEB), una hoja de ruta que incluye directrices de carácter «transversal». Sobre él ayer dio cuenta el catedrático de la Universidad de Oviedo Francisco Bastida, refiriéndose a la necesidad de una normativa estatal, autonómica y local que vaya en consonancia con la realidad social que se vive y que partiría de la necesidad de incentivar el bienestar social y los hábitos saludables así como reforzar la idea de que el ciclista «forma parte de un grupo vulnerable de usuarios de la vía pública», similar al peatón, así como desterrar la idea de que es un «obstáculo» para los vehículos a motor.

En estas directrices se incluyen aspectos como la reforma del Código Penal para el endurecimiento de las penas en atropellos por imprudencia a ciclistas, o la implantación de beneficios fiscales para aquellas empresas que fomenten el uso de la bicicleta para los desplazamientos al centro de trabajo de sus empleados. Un aspecto en el que también incidió Carlos Núñez, presidente de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España (AMBE), quien destacó que el Ministerio de Empleo ya está haciendo un estudio sobre la repercusión positiva de este tipo de incentivos, personal «más sano y menos absentismo laboral».

Otro de los ejes de este plan estratégico, como destacó Nacho Tomás Ruiz, técnico de ConBici, es el que ya se está trabajando con la Junta de comunidades de Castilla-La Mancha y que ayer sirvió también para pedir más implicación de las diputaciones provinciales: favorecer la construcción de carriles bici en vías interurbanas que comuniquen núcleos poblacionales. Incluirlo en la planificación de obras significaría avanzar en el fomento de un medio más sostenible.

Bastida, por su parte, también señaló la necesidad que incluye el PEEB de crear una Agencia Estatal de la Bicicleta e incluir en el diseño y aprobación de obras la memoria del impacto sobre la movilidad sostenible, igual que ahora se mide el ambiental (DIA). Porque se trata, dijo, de establecer «una discriminación positiva» que sirva de aliciente.