El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón destinará 120.000 euros al año a las medidas anunciadas para descongestionar las Urgencias hospitalarias y rebajar la afluencia, sobre todo al Miguel Servet. La mayor parte de esa cantidad se dirige a la apertura de una planta en el propio centro zaragozano para habilitar un hospital de corta estancia dirigido también por los profesionales de Urgencias.

Para esta planta, que se abrió el pasado sábado y que estará disponible solo en caso de necesidad--, se ha contratado a 14 enfermeras y otros tantos auxiliares de enfemería, pero no será necesario reforzar la plantilla de facultativos.

El gasto que supone la apertura --desde el pasado lunes-- del servicio nocturno de Urgencias del Punto de Atención Continuada (PAC) del centro de salud de Sagasta será mucho menor, ya que, según indicaron ayer fuentes del departamento, solo se ha tenido que acometer la contratación de una enfermera, un celador y un facultativo, encargados de asumir la habilitación desde las 20 a las 24.00 horas. Sanidad descartó prolongar ese horario de apertura más allá de la medianoche ante el escaso flujo --una media de seis o siete-- de pacientes que acudían de madrugada al PAC en la anterior etapa.

Además, también está en estudio la apertura de otros dos PAC, que se situarían en los centros de especialidades Inocencio Jiménez y Grande Covián, aunque esta medida se aplicaría, en todo caso, a largo plazo. Así lo expuso recientemente el propio consejero, Sebastián Celaya, que, ayer, valoraba esta posibilidad. "Son zonas donde los hospitales quedan un poco más lejos y está claro que, si el hospital no está cerca, la gente acude a su centro de salud".

En este sentido, Celaya insistió en su intención de analizar esta vía "aunque los recursos son escasos y, si hacemos esto, dejaremos de hacer otra cosa, pero a la población hay que ofrecerle la opción de acudir a su centro de salud. No podemos pedirles que vayan si les vamos cerrando o no ofreciendo estos PAC", indicó.