El embrollo en el que se ha convertido la negociación del presupuesto autonómico para este 2017 está lejos de despejarse. Podemos trabajará durante este fin de semana en el borrador presentado por la DGA para decidir si se abstiene o votará en contra de la toma en consideración del documento en las Cortes de Aragón, el único lugar en el que en estos momentos están dispuestos a negociar las cifras. «Sentarnos en una mesa antes de que se registren será hablar de promesas, una vez presentados podremos hablar de hechos», afirmó ayer el secretario de análisis político, Lorién Jiménez.

Aunque en un primer momento la condición para la negociación era el cumplimiento de cinco medidas para el fomento de empleo, la realidad de los números presentados por el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, ha modificado la situación. «Con la información actual no podemos tomar una decisión», reconoció Jiménez. Pese a todo, el Consejo Ciudadano de Aragón se reunió ayer para valorar en lo posible el cumplimiento socialista y las consecuencias que está provocando la prórroga presupuestaria. Las posibles decisiones se conocerán durante la mañana de hoy.

Situación enquistada

Podemos lamentó que en el origen de esta situación enquistada están «los dilemas internos del PSOE» y recordaron que muchas inversiones, proyectos y colectivos se verán afectados. «Están poniendo en peligro las políticas para la gente», denunció Lorién. Y agregó que dentro del propio partido socialista están molestos con la situación, especialmente por su presencia en el territorio. También consideró que el departamento de Hacienda con esta actitud está ganando tiempo y «rascando décimas de déficit» para cumplir con las políticas de austeridad de Bruselas. De hecho, calificó como «recortes» el tiempo que se pase con los presupuestos prorrogados.

Y siguiendo la línea marcada desde el miércoles, cuando se hizo público el borrador, siguieron las críticas a los planes expuestos por el presidente Javier Lambán. Para el secretario de análisis político, el documento presentado por el Ejecutivo socialista es un «sustituto» con las «cuentas de la lechera». «Las cifras a día de hoy no son reales porque faltan los Presupuestos Generales del Estado», dijo.

Jiménez precisó que aunque las estimaciones presentadas puedan parecer «buenas», durante el curso pasado tuvieron que lidiar con modificaciones presupuestarias que acabaron deformando el proyecto inicial. «El problema de base no reside tanto en las cifras como en la fiabilidad que ha demostrado la DGA a la hora de llevarlas a cabo», explicó.

Desde el otro lado del espectro ideológico llegó otra propuesta para desbloquear la coyuntura, que por el momento no ha sido bien recibida en la formación morada. La portavoz de Ciudadanos en las Cortes de Aragón, Susana Gaspar, sugirió al Gobierno de Aragón convocar una «mesa de diálogo» con todas las formaciones políticas, al considerar que la prorroga está perjudicando a todos los aragoneses. A la espera de la postura final que tomen en Podemos, el acuerdo para sacar adelante las cuentas parece lejano.