El diputado del PP en las Cortes Eduardo Péris ha alertado hoy del retraso que acumula el Gobierno de Aragón en la implantación de la banda ancha de nueva generación en cerca de cuarenta municipios de la Comunidad.

Un retraso que, a su juicio, "es responsabilidad exclusiva, salvo algún caso muy concreto, del gobierno que preside Javier Lambán, que se escuda en excusas técnicas cuando la realidad es que no pone el dinero necesario para hacer funcionar unas instalaciones que ya podrían estar en servicio."

Según indica Péris en una nota de prensa, la consejera de Innovación, Investigación y Universidad, Pilar Alegría, reconoce en una respuesta escrita el retraso pero esgrime razones que "carecen de fundamento" en relación con el respeto a normativas europeas y la obligación de guardar determinados plazos que ya han sido superados, y "cuestiones técnicas" que no aclara.

El diputado considera además que el hecho de que Alegría lo dirija a la página "http://conectaragon.org/" en lugar de responder con mayor detalle y profundidad "delata su escaso interés por tener informado al Parlamento."

Péris recuerda que el proyecto ConectAragón fue diseñado por el anterior Ejecutivo autonómico presidido por el PP con el objetivo de dotar de cobertura de hasta 30 Mbps a cerca de 100.000 aragoneses que viven 348 núcleos de población, la mayoría de ellos con pocos habitantes, donde los operadores privados ni llegan ni tienen previsto instalarse debido a la ausencia de rentabilidad.

El objetivo era, en su planteamiento inicial, que al final del despliegue el 98 % de los aragoneses tuviera acceso a la banda ancha de nueva generación en unos plazos que, según el parlamentario, no se están cumpliendo.

La conexión rápida a través de internet es, para Péris, una infraestructura básica del siglo XXI, como en el siglo pasado lo fueron las comunicaciones por carretera o ferrocarril, además de resultar estratégica para comunidades autónomas con un elevado índice de despoblación y dispersión territorial, como Aragón.

Por ello, insiste en que es imprescindible que el Gobierno de Aragón no retrase su puesta en marcha para mejorar la calidad de vida de los aragoneses que viven en pequeñas poblaciones, aumentar las oportunidades y la competitividad de las pymes del medio rural y asentar población y disminuir el desequilibrio territorial.