Iba a intervenir en su turno de explicación de voto la diputada del PP, Carmen Susín, tras una hora larga de intenso debate parlamentario sobre la reforma de la ley del aborto. No pudo hacerlo, ya que un amplio grupo de mujeres vestidas de violeta interrumpieron al grito de Aborto libre desde la tribuna de invitados. Fueron diez minutos seguidos coreando ese lema y esgrimiendo una pancarta en la que se podía leer ese derecho que ahora pretende restringir el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón.
En la tribuna, este colectivo no estaba solo. El PP había logrado movilizar a un amplio sector del colectivo Provida --junto a miembros de Nuevas Generaciones y diputados provinciales-- que también interrumpieron y trataron de neutralizar la protesta feminista con aplausos hacia las bancadas populares. La cara de desconcierto de la Mesa de las Cortes era patente y el presidente, José Ángel Biel, mostró cintura y suspendió la sesión. Diez minutos después, cuando la marejada no amainaba, entraron los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y desalojaron la tribuna pacíficamente.
EL MEJOR ALIADO Fue el colofón a un tenso e intenso debate en el que se demostró que el PP aragonés es el mejor aliado que tiene el PP nacional. El mismo día que el Parlamento extremeño, gobernado por el PP, solicitaba que se retire la reforma de la ley del aborto --que convertirá a España en el Estado de la UE con una ley más arcaica, restrictiva y que ha sido incluso criticada por la extrema derecha europea-- las diputadas del PP aragonés aplaudían con fervor la encarnizada defensa que su diputada Carmen Susín hizo de un proyecto que ha encontrado críticas dentro y fuera del partido que gobierna. Ayer, también Cataluña y Andalucía aprobaron que se retirara esta controvertida ley que impedirá a las mujeres a abortar libremente (más información en página 28).
Sin embargo, las cuatro iniciativas que se presentaron y debatieron ayer fueron rechazadas. IU, PSOE y CHA solicitaban la retirada del anteproyecto a la vez que IU reclamaba la reprobación de Rudi y el PSOE el cese de Gallardón. El PAR jugó a unos equilibrios que no entendió nadie y se quedó solo en su iniciativa, defendida por el diputado Manuel Blasco, en la que pedía que se pospusiera una ley que no atendía "a una demanda social urgente". La actitud del PAR ayer fue contradictoria, pues aludió a "la reflexión, la serenidad y el consenso" a pesar de que en la DPZ, la DPH, y consistorios como Calatayud y Jaca han mostrado su rechazo al anteproyecto.
Las diputadas de la oposición que defendieron sus respectivas iniciativas no ocultaron su "vergüenza y tristeza" al comprobar los enfervorecidos aplausos y defensa cerrada que hacían las diputadas conservadoras, que no dejaron de interpelar desde el escaño y hacer muecas de desaprobación durante las intervenciones de la oposición. En especial, las habituales, como Carmen Susín o Marian Orós. La diputada de IU, Patricia Luquin, se preguntó desde qué "atalaya moral" se erige el PP "para decidir" sobre su vida. "Las mujeres no queremos tutelas", "España se homologa con países como Nigeria", "Rudi no representa a miles de mujeres con sus declaraciones anacrónicas, retrógradas y ofensivas" o "defienden los derechos de Rouco Varela y no el de la mujer" fueron algunas de las críticas vertidas por Luquin.
No se quedó sola, puesto que la diputada socialista, Lorena Canales, también dijo sentirse "avergonzada" y aseguró que "Rudi no representa a las mujeres aragonesas", al tiempo que criticó que se vetara la comparecencia de la presidenta y ni siquiera asistiera al pleno de ayer.
"ÚTEROS CON PIERNAS "Nos quieren imponer su moral" y reclamó al PP que dejen "tranquilos a los ciudadanos, porque cuando nos quieren ayudar nos quitan derechos y nos recortan, les gusta tener a las mujeres en casa limpiando y fregando pero les da vergüenza decirlo. No somos úteros con piernas", indicó Canales. En una línea similar se mostró la diputada de CHA, Carmen Martínez, quien admitió que sí tiene miedo al PP cuando gobierna "porque trae más paro y más recortes de libertades".
Por su parte, Susín se defendió atacando, criticando a "la izquierda por tener miedo a la democracia cuando no gobierna", defendió a Rudi por mostrarse partidaria de esta ley y atacó aludiendo a Indalecio Prieto, socialista de la República, a quien acusó de no defender los derechos de las mujeres. Un argumento palmario.
