El cruce de acusaciones entre el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza por las becas de comedor del verano vivió ayer un nuevo capítulo. Tras las declaraciones del jueves de la consejera de Educación, Mayte Pérez, y la vicealcaldesa y concejala de Derechos Sociales, Luisa Broto, el testigo de este rifirrafe lo tomó ayer el presidente de Aragón, Javier Lambán.

El secretario general de los socialistas aragoneses acusó a Broto de mentir en su argumentación de que el consistorio no ha recibido ninguna propuesta de convenio de estas becas por parte del Ejecutivo. "Miente", aseveró. Y ratificó el ofrecimiento desde hace meses de "la Broto buena" --en referencia a María Victoria Broto, consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales-- para acordar un pacto por estas ayudas. "Se ha puesto en evidencia que Unidos Podemos no tiene en cuenta a las personas y que es un proyecto única y exclusivamente de poder", dijo.

"Zaragoza mantiene sus servicios públicos gracias exclusivamente al Gobierno de Aragón, y como ejemplo es que el ayuntamiento de la capital rechazó la propuesta de convenio para el servicio de comedor", recalcó Lambán, quien aprovechó el acto de campaña electoral y añadió que "a Unidos Podemos y al PP les une entre otras muchas cosas su favor absoluto con la mentira, donde se revelan como consumados maestros".

En el ayuntamiento, la concejala socialista Lola Campos también arremetió ayer contra la actitud del Gobierno de Zaragoza en Común con este tema.

La edila no solo le pidió a la responsable de Derechos Sociales que "reconsidere su postura y el diálogo con el Gobierno de Aragón, sino que acusó a Luisa Broto de "hacer caja a costa de los servicios sociales" por negarse a colaborar con los 180 euros por niño que costaría atender a los 1.547 escolares que podrían beneficiarse del programa Abierto por Vacaciones a través de 28 centros, no solo seis como sucede con la iniciativa municipal que representa Zaragalla.

EXCUSAS Para Campos, la DGA ha liberado al consistorio de mucho gasto aumentando los beneficiarios de las becas durante el curso y desmintió a Broto asegurando que sí hubo conversaciones entre ambas administraciones por este asunto desde septiembre en las que, aseguró, sus representantes mostraron una "soberbia innecesaria".

Por tanto, los argumentos actuales son "excusas de mal pagador" y una postura "incongruente" con el discurso de ZeC sobre atender a la emergencia social. "Quieren ahorrar dinero con los comedores de verano", lamentó Campos. "Los paganos no somos los partidos, sino los ciudadanos y, en este caso, niños que quieren comer en verano", añadió.

En cualquier caso, más allá de acusaciones en plena campaña electoral y de conflictos entre DGA y ayuntamiento, desde Educación se garantiza que 8.500 alumnos de la comunidad tendrán derecho a la beca de comedor este verano, entre ellos, los 2.500 estudiantes que viven en el medio rural.

La resolución de los colegios que adoptarán el programa Abierto Por Vacaciones se conocerá en breve. Las familias no tendrán que hacer trámites, ya que automáticamente todos los beneficiarios del comedor durante el curso pasarán a las ayudas de verano.