El lunes, la Ciudad de la Justicia albergará el primer juicio contra uno de los jóvenes antifascistas presuntamente relacionados con los disturbios tras la celebración de un concierto nazi en el Hogar Social que la formación de extrema derecha Movimiento Social Republicano (MSR) mantenía en Las Fuentes.
En realidad, el joven que el lunes se sentará en el banquillo no lo hará por los disturbios policiales (un ataque con palos y patatas con clavos a los antidisturbios que se juzgará en octubre), sino por una presunta agresión a uno dirigente del MSR, que este denunció en el 2016. No solo le acusa de lesiones sino de un delito de odio, por lo que las penas que le solicita suman cinco años de prisión. La Fiscalía lo rebaja a dos años y medio y una indemnización de 4.800 euros, algo mayor que la que pide el propio acusador particular.
La plataforma de apoyo a Los 10 de Zaragoza, como se conoce al colectivo de detenidos, ha convocado el lunes a las 11.30 horas una concentración de apoyo al joven juzgado en la propia Ciudad de la Justicia. Afirman que el joven acusado fue identificado aleatoriamente por el denunciante, y que ni siquiera estuvo allí, como apoyaría el hecho de que no fue detenido.
Los que sí lo fueron se sentarán en el banquillo el próximo mes de octubre, con una petición de condena por parte de la Fiscalía de ocho años de cárcel y alrededor de 22.000 euros de multas e indemnizaciones por los disturbios.
