El magistrado del Juzgado de Instrucción número 3 de Teruel ha dictado auto de prisión provisional y una orden de alejamiento para un joven por abusar de su novia menor de edad al violarla, pese a su resistencia.

El titular del juzgado, especializado en violencia contra la mujer, considera al hombre como posible autor de un delito de violencia contra la mujer en su modalidad de agresión sexual.

Los hechos ocurrieron el pasado día 10 de julio en Teruel, el último día de las fiestas, cuando el investigado mantuvo relaciones sexuales a la fuerza con su novia, una menor de edad, a pesar de que la víctima se opuso y se negó rotundamente a ello hasta en cinco ocasiones y «opuso toda la resistencia que le era posible», tal y como explica el juez en su auto de prisión provisional.

Según resaltó el magistrado, las manifestaciones de la menor «no adolecieron de error, ni contradicción ni inexactitud alguna», algo fundamental en este tipo de delitos que suceden en la intimidad, y en los que a menudo el testimonio de la víctima es la única prueba contra los agresores.

Corrobora el juez en su auto que el joven fue plenamente consciente de que mantenía relaciones sexuales y tocamientos corporales sin consentimiento ni autorización de la víctima, «siéndole totalmente indiferente dicha oposición o resistencia».

Tras analizar toda la prueba practicada en las diligencias, el juez ha decretado su ingreso en prisión para evitar que pueda actuar contra la integridad física y psíquica de la menor y ante el riesgo de que pueda cometer otros hechos delictivos similares, añadieron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Aragón..

El juez señala además que se trata de asegurar la presencia del investigado en el proceso ante la existencia de un manifiesto riesgo de fuga, teniendo en cuenta que las penas máximas con la que se castigan los delitos perpetrados son superiores a dos años de prisión (cárcel de 6 a 12 años)..

Por la gravedad de los hechos ocurridos, la peligrosidad del acusado y el peligro para la integridad física y psíquica de la menor, el instructor ha dictado una orden de alejamiento con la prohibición de que se aproxime a menos de 500 metros de ella y comunicarse con ella.

Además le prohíbe residir o acudir a la ciudad de Teruel durante todo el tiempo que duren las diligencias judiciales abiertas contra él.