La declaración, el año pasado, de la Semana Santa de Zaragoza como fiesta de interés turístico internacional marca un antes y un después en la historia de la ciudad. Así lo piensa Jesús Boíllos, secretario general de Horeca, que asegura que estas fechas la capital llegará a un índice de ocupación del 88%, lo que representa un 5% más que en el mismo periodo del año pasado.

A medida que han ido pasando los días y se ha ido acercando Jueves Santo, "han aumentado también las reservas de última hora, tanto en la provincia como en la ciudad de Zaragoza", indica Boíllos. "La concentración importante de visitantes se dará durante el fin de semana", subraya.

Para el responsable de Horeca, la capital aragonesa ha ido incrementando su atractivo en el resto de España gracias a las continuas mejoras que experimenta la celebración de su Semana Santa, que "se ha convertido en una celebración especial".

Paralelamente, la provincia también se ve favorecida por un aumento de la ocupación, según los datos que maneja Horeca de Zaragoza y que ha ido mejorando a medida que se acercaban las fechas festivas.

En este sentido, la cada vez mayor tendencia a reservar a última hora se ha visto impulsada por las buenas predicciones meteorológicas para el conjunto de la comunidad aragonesa.