El pleno de la Diputación Provincial de Huesca (DPH) acordó ayer por unanimidad solicitar al Gobierno central la declaración de la provincia altoaragonesa como zona afectada gravemente por las intensas lluvias torrenciales que provocaron daños a las infraestructuras de comunicación con el Pirineo.

El acuerdo institucional insta, además, al Ejecutivo aragonés a incluir la provincia de Huesca en la petición hecha al Gobierno estatal para declarar como zona afectada todos los municipios que sufrieron inundaciones durante la reciente crecida extraordinaria del río Ebro.

Además se reclaman «medidas permanentes de atención» a los servicios básicos de los habitantes de las comarcas pirenaicas de la Jacetania, Alto Gállego y parte del Sobrarbe, por las complicacoines que sufren durante el periodo invernal.