Catorce personas atendidas. Ese fue el balance de la primera jornada de atención de urgencias nocturnas en el hospital Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza tras el cierre, el pasado lunes, del Punto de Atención Continuada (PAC) del centro de salud de Sagasta.

Concretamente, entre las 20.00 horas y las 00.00 horas se recibió a 9 pacientes, mientras que entre las 00.00 horas y las 8.00 horas acudieron al Provincial 5 personas. El Departamento de Sanidad consideró que el primer día de atenciones tras la clausura del PAC transcurrió "estupendamente, sin provocar colapsos ni nada", detallaron las fuentes. "Eso es lo más importante", matizaron.

Según el Salud, el hospital Nuestra Señora de Gracia atiende diariamente alrededor de 25 urgencias, mientras que el hospital Miguel Servet afronta entre 200 y 300. La baja demanda del servicio en el Provincial es una de las principales razones esgrimidas para justificar el cierre del PAC y su traslado al Provincial. "Es una medida razonable", declaró el consejero Ricardo Oliván esta semana.

Sin embargo, la noticia de la derivación de estas consultas nocturnas se ha encontrado en las últimas semanas con la oposición de varios vecinos de la zona centro de la ciudad, de asociaciones como Torre Ramona y de Marea Blanca. Precisamente, este último colectivo criticó ayer el cese de la actividad en Sagasta y aseguró que "el coste estimativo de las urgencias en un centro de salud es de aproximadamente 22 euros, frente a los 100 euros que cuesta la atención en las urgencias hospitalarias, por lo que con el cierre en vez de ahorrar se gasta mas", señalaron.

EDUCACIÓN CIUDADANA Por su parte, Oliván declaró el lunes durante la visita al nuevo centro de especialidades que el cierre del PAC estaba motivado por "una cuestión de números y sentido común" tras analizar la actividad "tanto en Sagasta, como en el Provincial y el Servet".

Desde Marea Blanca se apuntó que los diferentes Servicios de Urgencias de Atención Primaria (Suap) de la ciudad "atienden a más de 8.000 pacientes al año en el turno de noche con la dotación de un celador, un enfermero y un médico", unos equipos que "amortiguan la posible saturación de las urgencias hospitalarias", matizaron a través de un comunicado. "Para optimizar servicios sanitarios no hace falta cerrarlos, sino educar a través de campañas a la ciudadanía, para que haga un uso adecuado de los mismos", añadieron.

LOS SECTORES Sobre la atención que se ofrecerá a los pacientes, el colectivo negó que se trate de usuarios del sector III, al que pertenece el Provincial. "La población que atiende en su mayoría el centro de Sagasta pertenece al sector II, cuyo hospital de referencia es el Miguel Servet y no este", indicaron desde el colectivo.

Por último, Marea Blanca consideró que el cierre de las urgencias de Sagasta "subyace el deseo de iniciar el camino hacia la instauración del Área Única" en la comunidad y "solo tiene como fin recortar más en sanidad como respuesta al empeño de la consejería de destruir la Atención Primaria", agregaron.