Lejos de decidir quién sustituirá al actual presidente de las Cortes de Aragón, el socialista Antonio Cosculluela, los grupos de la izquierda (PSOE, Podemos, CHA e IU) abrieron ayer un nuevo debate que, parece, va a dilatar más la decisión: alcanzar la institucionalidad parlamentaria, o lo que es lo mismo, firmar un pacto de estabilidad política o de gobernabilidad. El PSOE acudió a la reunión a cuatro con una propuesta inesperada que sorprendió a Podemos. Los socialistas quieren crear un foro permanente de debate entre "las fuerzas progresistas" donde se traten los temas relevantes para Aragón y que dé estabilidad al Gobierno de Lambán. Sería en esta comisión donde se decidiría quién conforma la mesa de las Cortes. Este jueves se seguirá con el doble debate.

El encuentro de ayer tenía como objetivo avanzar en la crisis de la mesa de las Cortes originada desde que Cosculluela anunciara su renuncia al cargo (que aún no se ha hecho efectiva). Todo apuntaba a que la reunión se convertiría en un cruce de propuestas sobre quién ocupa cada sillón. Pero no fue así. El PSOE acudió a la cita con una propuesta clara: establecer un foro de "debate permanente para garantizar la mayoría de izquierdas progresistas", explicó el portavoz socialista, Javier Sada. Apeló a la responsabilidad de la izquierda para establecer un diálogo constante entre las cuatro fuerzas de izquierda que permita sacar adelante los presupuestos del 2017 o las leyes de emergencia social.

A FAVOR

Tanto CHA como IU compartieron la necesidad de dar estabilidad política a Aragón y que sea este foro el que decida, fruto del consenso, la formación de la nueva mesa. "Necesitamos institucionalizar el espacio de las cuatro fuerzas", apuntó Patricia Luquin (IU), que señaló la importancia de poder trabajar de una forma fluida que permita generar estabilidad. Desde CHA, Gregorio Briz, destacó la importancia de que exista "la concurrencia de las cuatro formaciones" para hablar de política y "evitar que alguna fuerza de la izquierda pueda pactar con la derecha". Para Briz, este acuerdo de estabilidad permitiría tomar decisiones para Aragón sin "deslealtad y desconfianza".

Podemos se salió del guión y mostró su rebeldía. Para su portavoz, Violeta Barba (vicepresidenta de las Cortes y que suena para sustituir a Cosculluela, aunque ayer no quiso dar nombres), se trata de temas diferentes e independientes que deben negociarse por separado. Barba reiteró la intención de su formación de concurrir a la Presidencia con el documento que presentó hace una semana, Una presidencia para el siglo XXI. La vicepresidenta admitió que el pacto de gobernabilidad sería positivo para Aragón, pero no "hay que vincularlo" a la negociación de las Cortes. "Primero hay que solucionar esta crisis que no tiene nada que ver con institucionalizar las reuniones", subrayó.

La formación morada considera la renuncia de Cosculluela como un paso atrás del PSOE. "Entendemos que no quieren seguir con la presidencia", apuntó.

El portavoz socialista negó que el PSOE renuncie al cargo. "Los nombres son lo menos importante aunque entiendo que tiene más morbo", pero el "único marco para hacer un cambio en la mesa es este foro", subrayó. Respecto a los pactos internos para conseguir los objetivos, Sada rechazó que se trate de "un intercambio de cromos".